sábado, 26 de diciembre de 2020

Lecciones que aprendí en el 2020

Como ya es tradicional en este blog, vamos a hablar de aquellas cosas que aprendí este año. Algo que me sorprendió es que pese a tener más tiempo para escribir en el blog, es el año en el que publiqué menos... quizás la inspiración no me llegó tanto como en otros años. Bueno, empecemos.

1) Que las amistades van cambiando a lo largo del tiempo. A veces alguien que conoces desde hace mucho tiempo, ha cambiado tanto y tu también que simplemente la visión que compartían de las cosas ya no existe, y por lo tanto la amistad ya no es la misma. 

2) Que aunque sea doloroso es necesario alejarme de ciertas personas. Este año me di cuenta de que poner límites es muy importante para tener relaciones sanas, y que las personas que no entiendan tus límites y no los acepten, simplemente deben salir de tu vida. 

3) Este año, una vez más, me mostró que la vida es muy cambiante. Que no importan los planes, o las cosas como tu las crees, porque de un día para otro todo puede cambiar, sin previo aviso, solo sucede.

4)  Que hay que aprender a apreciar mucho la soledad. Fueron tiempos difíciles para todos, y muchas personas se tuvieron que aislar. Aprender a convivir con nosotros mismos y nuestra soledad se convirtió en algo realmente importante. Se tiene que aprender a lidiar con la soledad, no hay de otra.

5) Que hay mucho trabajo interno propio que tengo que realizar. Este 2021 pienso distanciarme de algunas personas porque creo que es lo más sano para ambas partes. Y aprender a sobrellevar ese distanciamiento que yo he elegido hacer. También tengo que trabajar aún más en mis límites. Tengo que invertir más en mi self care, pero no solo el físico, sino en el mental y espiritual.

6) Que debo, también, alejarme un rato de las redes sociales. Han dejado de ser divertidas para convertirse en un lugar tóxico (si fb, te estoy hablando a ti) donde lo único que se hace es linchar, juzgar y criticar públicamente a las personas que no comparten una idea que la mayoría ve como buena o justificada.

7) Que los seres humanos somos frágiles y que aun nos falta un largo camino en este proceso llamado evolución, y que hay organismos que nos llevan la ventaja.

Esto es lo que he aprendido a lo largo de este año, y en lo que también trabajaré en el siguiente. Por cierto, feliz post Navidad, aunque sé que han sido tiempos difíciles, y de hecho no quería utilizar el término "feliz", así que  espero que lo hayan pasado lo mejor posible en las condiciones actuales.

lunes, 21 de diciembre de 2020

La modificación de los conceptos

 A lo largo de nuestras vidas, y conforme vamos pasando por distintas cosas y vamos evolucionando, los conceptos que tenemos  sobre distintos temas van cambiando.  A veces ocurre "algo" que te hace modificar el concepto (o mejor dicho tu propio concepto)  de lo que tu creías o considerabas que así era. Nuestra mente, es tan maravillosa, que el cerebro va recopilando cada día nuevos datos que nos permiten modificar muchas cosas que nosotros ya dábamos por sentado que conocíamos, aunque esto, muchas veces puede ser doloroso, sobre todo cuando va ligado al aspecto sentimental, porque te vas danto cuenta de que lo que antes tu considerabas importante, puede ser que con el tiempo ya no lo sea.

Una de las cosas que se ha modificado para mí, y sobre todo en este año, ha sido el concepto de amistad. Ciertamente mi concepto no es el mismo que yo tenía cuando iba en la primaria, aunque ciertamente también, si se conservan algunas bases, pero antes te peleabas por cosas sin importancias y pensabas que era el fin del mundo, ahora te peleas por cosas que son mucho más complicadas y a veces, si es el fin de esa relación.

A veces me pongo a pensar en como este concepto de "amistad" ha cambiado tanto para mí a lo largo de los años, e incluso a veces, al paso de unos meses. Y es que tanto las acciones que tu haces, como las que hace la otra persona, pueden dar al traste con ese concepto preconcebido que tu tú tenías. Para mí, cada vez que termino una amistad, o lo que yo consideraba una amistad, me hace replantearme ese concepto y me hace redefinirlo para mis futuras relaciones, y también para las presentes. 

Este replanteamiento no es fácil, porque viene acompañado de muchos sentimientos, pero cuando haces una retrospectiva de las cosas, puedes darte cuenta de varias cosas. Creo que definir nuestros conceptos en el ámbito sentimental es sano, nos ayuda a darnos cuenta de nuestros errores y trabajar en ellos, de poder cambiar ciertas actitudes, y de revalorizar nuestros lazos con la demás personas, además de que nos permites establecer límites, lo cual (me he dado cuenta) es esencial y necesario.

Cualquier tipo de relación siempre será complicada, porque siempre tendrá que hacer un proceso de "ceder y aceptar" porque cada persona siempre es diferente, y tiene sus propios defectos y virtudes, y está en cada uno de nosotros el decidir cuales de haces actitudes estamos dispuestos a sobrellevar y cuales no tienen cabida en nuestros conceptos.

Sin duda una de las lecciones más importante que aprendí este 2020.

domingo, 6 de diciembre de 2020

La sororidad

La semana pasada me fui a tomar un cafecito con una amiga. La verdad es que tuvimos una de esas pláticas (que ya me hacía falta) que puedo decir que fue bastante provechosa. Hablamos de muchas cosas y nos sinceramos en varias, y me doy cuenta de los mucho que extrañaba ese tipo de pláticas que tienen profundidad y que no solo se centran en el trabajo, o en cosas banales, sino en aquellas donde realmente las partes comparten algo de ellas mismas. Teniendo esa plática con mi amiga, me doy cuenta de que a las mujeres (específicamente) nos hace falta hablar de muchos temas, de aperturarnos un poco más a cosas que nos guardamos por el temor a ser juzgadas. Creo que, cuando compartes algo que habías decidido mantener guardado por pena, te liberas, y puedes hallar una conexión mucho más profunda con tus amistades. 

Mi amiga esta emprendiendo un viaje, pero no me refiero a un lugar, sino un viaje personal, y realmente me siento muy entusiasmada por ella. Le he visto un cambio de actitud y una onda positiva bastante cool que puedo ver en sus ojos. Este viaje que ha empezado, y que ha seguido, porque no es fácil mantenerlo, me parece que le esta ayudando a resolver algunas cuestiones personales, lo cual me parece algo muy bueno. Creo que siempre que haces algo positivo por ti y para ti, se refleja, y no solo en uno mismo, sino que permea a los demás. Y justamente a este punto quería llegar.

Durante la plática mi amigo me dijo "es que me he inspirado en ti" y no saben lo bonito que sentí al escuchar esas palabras. Si se puede considerar un halago, creo que es de los más bonitos que me han dicho. El hecho de que ella me considere como una "inspiración" aunque sea en algo simple pero que al mismo tiempo es parte de su viaje personal realmente me llega. Y no solo lo veo en mí, veo que ella trata de compartir cosas positivas a otras personas y eso en verdad, me da mucho gusto. 

Me alegra que poco a poco, se vaya tejiendo esta sororidad en su mundo, y que a la vez, me consideré dentro de él, porque seamos honestas, por más feminismo que vemos anunciado, yo no he visto demasiada sororidad en mi entorno. Lamentablemente, en mi país, creo que esta sororidad de la que tanto se habla, se esta construyendo, esta como en los cimientos, pero muchas veces falla por distintas causas. De hecho, recientemente me pregunté si algún día seríamos capaz de alcanzar dicha sororidad, porque sinceramente, a veces no la veo. 

No, no se trata de fingirla ni de aplicarla todo el tiempo, pero a veces me desconciertas, que siendo nosotras mujeres, y muchas veces amigas, lleguemos a tener comportamientos o comentarios misóginos hacia nuestras semejantes. Lo sé porque en varias ocasiones me ha sacado de onda, el hecho de recibir ciertos comentarios de mis amistades justificando comportamientos o acciones, que a mi parecer, como sociedad civilizada que somos, no lo son y s me hace increíble. Creo que muchas veces las mujeres podemos no ser conscientes de este tipo de comentarios, y los hacemos sin pensar y sin darnos cuenta de que hay toda una historia detrás del porque los hacemos.

Me parece que, aunque hemos avanzado mucho como colectivo, aún tenemos bastante trabajo que hacer en nuestro entorno inmediato. A veces se nos olvida que un simple comentario diciendo algo bonito o agradable pueda ayudarle a una persona en su día,  o a si misma. Comentarios que de verdad salgan desde el fondo de nosotras diciendo aquellas cosas que admiramos de la otra persona, o algo que nos guste de ella, eso puede ayudar a que la otra persona se sienta mejor. Ojalá que sí, ojalá que algún día alcancemos esa sororidad a la que tanto aspiramos. 

domingo, 22 de noviembre de 2020

La "diferencia" (no, no es la canción)

 

Pensé que ya había pasado mucho tiempo desde que había escrito y me doy cuenta que han transcurrido solo 20, vaya, que relativo es el tiempo. Desde esa ocasión hasta hoy no había sentido muchos ánimos de escribir porque se han sucedido varias cosas, como una reacción en  cadena, y todo eso ocupaba lugar en mi cabeza y no tenía ganas de ocupar mi espacio en algo más que no fuera en el presente. Sin embargo, estoy aquí, aunque no muy convencida sobre la entrada que escribiré. 

Una de las cosas que han sucedido, fue que tuve una "diferencia" con un amigo (aunque sinceramente no sé si amigo sea el término correcto, pero lo vamos a dejar así). Resulta, y voy a resumir mucho la historia, que en el pasado, yo ya le había comentado que había ciertas cosas que hacía que no iban conmigo, osea ciertas acciones en lo que respecta a nuestra manera de comunicarnos que no me gustaban y que por favor en lo que respecta a mí persona tratara de evitarlas. Si ya sé que uno no va a cambiar a la gente y bla bla bla, pero neta, creo que a veces si alguien te solicita algo, puedes por lo menos intentar hacerlo. En fin, resulta que aquella vez que le dije se indignó pero al final lo arreglamos y todo normal. Llegas a un punto en el que sabes que no puedes cambiar a la gente y solo fluyes con ellas, o te alejas, ambas cosas son aceptables. Bueno yo sobrellevé nuestra "amistad" aunque cada vez menos cosas me parecían, así que comencé a distanciarme un poco (aunque ahora pienso que no lo suficiente).

Sobrellevé y sobrellevé. Yo solía ser de las personas que nunca decía cuando algo me molestaba para no entrar en conflictos, ahora si lo digo para evitar futuros conflictos, pero aceptemos que si no hay cooperación de la otra parte, el conflicto es inevitable. Entonces el fin de semana pasado me harte y le dije una de las cosas que pensaba, obviamente no le pareció y se indignó, me contestó algo que tampoco me pareció y desde ese entonces no hablamos.

No es la primera vez que me sucede, y dudo que sea la última. Creo que a veces pecó de expresar mis opiniones y termino siendo vetada, pero la neta, creo que es porque una parte de mí ya esta cansada de lidiar con ciertas actitudes infantiles, yo sé que nada es 100% maduro (si es que eso existe) pero creo que hay ciertas actitudes que de plano deben quedarse en una etapa mucho más atrás. Creo que inconscientemente, a veces "suelto" lo que pienso cuando ya no estoy con la ganas de seguir invirtiendo mi tiempo en una "amistad" con alguien que no compagino en actitudes, valores, o con apertura a diferentes opiniones. Quizás en esta historia, parezca que la cerrada soy yo, pero créanme que he tenido discusiones con otros amigos y nuestra amistad sigue como si nada, porque ya sabemos que habrá diferencias y que son aceptables.

Sin embargo, con esta persona, me doy cuenta que cada vez que le he expresado mi desacuerdo en algo simplemente se indigna, o ya no quiere seguir hablando; pero cuando he estado de acuerdo con él todo fluía muy bien. Es en ese punto donde cuestiono nuestra "amistad", cuando digo lo que no me parece y me lo tachan de "reclamos", cuando la otra persona solo quiere escuchar "halagos" pero no diferencias de opinión, o cuando cree que lo a mí me molesta no es importante. 

Cuando un recuento de todas estas veces que me ha sucedido algo similar me pregunto si yo soy la villana del cuento. Quizás para ellos sí, y quizás nunca nos entendieron mi forma de ser, ni yo la de ellos. Supongo que no puedes estar en la misma frecuencia con todos. Espero no haberlos revuelto mucho con mi historia. See you next time.

lunes, 2 de noviembre de 2020

Maternity Issues

En las últimas semanas me ha aparecido un comercial en YouTube de manera frecuente, el comercial habla sobre problemas de infertilidad y que puedes hacer. Al principio lo tomé como un anuncio más del montón, sin embargo, cada ves sentía que aparecía más y más y comencé a preguntarme, Universo estás tratando de decirme algo? Así que me he puesto ha reflexionar sobre el tema.

Lo cierto es que cada año que transcurre, siento como el reloj hace tic tac, cada vez más fuerte, y una voz dentro de mi cabeza me pregunta: acaso no quieres tener hijos? Durante los últimos años, la respuesta ha dio un constante "aún no", pero nunca lo he descartado por completo. Y sin embargo, cada vez más seguido escucho a mi mente decir "el tiempo se agota".

Pasado unos días después de mi cumpleaños, me puse a pensar en este tema. Hay varias razones por las que siento que aún no es momento de tener hijos, pero yo siempre he sido de la idea de que querer convertirte en madre debe brotarte de lo más profundo de tu ser, deber ser una fuerza abrasadora que te llene y te haga decir "quiero ser mamá". Sobre todo porque esa decisión, es una de las más importante que puedes tomar en la vida. Porque no solamente va a transformarte a ti, a tu futuro y todo tu entorno, sino que también ahora tienes la responsabilidad de guiar otra vida. Y eso se me hace abrumador. 

Recientemente vi el documental de Paris Hilton, y uno de los temas que ella trata, es precisamente, la maternidad. Ella a su edad tampoco tiene hijos, pero no lo descarta aunque ya no esté tan joven. Eso me hizo preguntarme a mi misma, y si llegó a su edad y tampoco los tengo? Porque seamos sinceros, la edad importa. Y entonces vuelve a sonar e tic tac.

Cuando veo a mis amigas que ya son mamás, pienso en si yo un día seré de "su club", y la verdad es que no tengo una respuesta para eso, no puedo decir si o no porque aun no lo sé. Siempre he pensado que llegará el momento adecuado, pero existe ese momento? He leído mil veces que uno jamás esta preparado para ser padre, y que todo lo aprendes sobre la marcha, y creo que es verdad.

Cuando era muy chica, pensaba que tendría mi familia joven, ya saben, el típico sueño en el que sales de la uni, conoces a tu príncipe azul y te casas, tiene hijos y eres feliz por siempre. Vaya, como ha cambiado eso. Definitivamente las cosas han sucedido bastante diferentes.

Cada vez que me hago la pregunta, hay miles de cosas que me pasan por la cabeza. Termino agobiada y sin una respuesta clara. Creo que por este año esto no sucederá (otra vez) pero quizás algún día.

jueves, 29 de octubre de 2020

Alone

 Han sido unas semanas extrañas, desde la última vez que escribí aquí y hasta ahorita siento que ha pasado mucho tiempo y la verdad es que no ha sido tanto. La neta es que quisiera escribir sobre muchas cosas pero hay algunas que aún no puedo poner en palabras, hay otras de las que no quiero hablar y las demás irán brotando próximamente. 

Creo que últimamente me ha pegado mucho lo de la cuarentena. Creo que comienza a hacer mella en mi esto del aislamiento, y me siento cada vez más sola. Y eso es algo que precisamente me ha golpeado en el sentido emocional, no solo por el hecho de sentirme sola sino por el hecho de que he aprendido que al final estás tu y solo tu para ti. Voy a tratar de explicarme mejor. 

Creo que a veces llegas al punto en el que debes lidiar tu solo con tus propios problemas, pero esto no lo digo a manera de reclamo, sino más bien como una especie de lección que estoy aprendiendo. A veces quisiera hablarle a mis amigos para decirles como me siento, pero por otra parte siento que no quiero aburrirlos con la misma cantaleta. 

Poco a poco me he dado cuenta de qué, en algún punto, tenemos que lidiar con nuestras propias cosas por nuestra cuenta. Y a veces no es porque los amigos no te apoyen, sino porque ellos también están lidiando con sus propias batallas, y atendiendo sus propios problemas, y uno tiene que aprender a hacer lo mismo.

Así que a veces inicio una conversación en la que le quiero decir a mis amigos  "oye me siento así..." pero al final me retracto porque no quiero aburrirlos con mis problemas. Así que estoy en el proceso mental de lidiar con ellos, porque al fin y al cabo sé que soy la única que puede resolverlos.

Creo que la cuarentena me ha hecho más consciente de mi soledad, y de como convivir con ella. A veces es extraordinaria porque me permite esparcirme por cosas que había querido hacer y que no no hacía por falta de tiempo o simple desidia, pero otras tantas se vuelve pesada, tanto, que siento que me aplasta y me asfixia.

Al final estamos solos, y creo que esa es una de las cosas más difíciles de entender en la vida, que somos entidades individuales aunque formemos parte de un todo. En fin, ya dejo de escribir porque no me quiero poner existencialista. Saludos.

lunes, 12 de octubre de 2020

Un historia de Guanajuato

 Como buena fan  de la ciencia que soy, y dada la situación actual, me pongo a leer algunos textos sobre diversos temas científicos, o veo algunos videos en You Tube o en Netflix, y para mi sorpresa, me doy cuenta de que, he podido entender mucho más conceptos gracias a mi intento de maestría frustrada. Sé que esa es una historia que no he contado porque, sinceramente, me daba mucha vergüenza decir que intenté estudiar una maestría y no funcionó, terminé dejándola y fue algo que me costó mucho procesar. Sin embargo, me he abierto poco a poco, y comencé a abrirme con ese tema con mis estudiantes. Les dije que es válido darte cuenta de qué algo no es para ti, y cambiar de opinión. Pero vamos por pasos.

Primero que nada debo decir, que durante ese período que estuve en la maestría, que fueron seis meses, pasaron un montón de cosas. Haciendo hoy una retrospectiva a ese momento, me parece que en seis meses viví todo una vida. Fueron los seis meses más exhaustos que he tenido en mucho tiempo, y del cual me costó aún más recuperarme en todos los aspectos, física, mental y emocionalmente. Pero como toda historia empezaré por el principio.

Me decidí a estudiar mi maestría en Guanajuato porque necesitaba un cambio de aires. En aquél momento, sentía que muchas cosas en mi vida no iban como yo quería así que pensé que estudiar una maestría fuera de mi estado sería lo mejor. Lo intenté la primera vez, y por azares del destino (o más bien porque soy muy distraída) no puse hacer el trámite, las fechas se me pasaron y tuve que esperar al siguiente período. Me deprimí, pero esperé a la siguiente convocatoria. Para ese entonces algunas cosas comenzaron a acomodarse, pero aún así me dije que quizás debería intentarlo, total aun quedaba por ver si pasaría el examen

Hice el examen y cuando venía de regreso, me dije que no iría, que aunque pasara el examen no me iría a estudiar allá porque sentía que ya no lo necesitaba. Me avisaron que pasé el examen y que si estaba decidida a irme los trámites iniciaban en tal fecha. Después de mucho titubeo, me animé. Dejé todo y me fui a Guanajuato. Pronto me di cuenta de que quizás no había tomado la mejor decisión.

La maestría comenzó y me conforme los días iban pasando, comencé a sentirme muy fuera de la liga. Mis compañeros, todos eran de allí, allí habían vivido y estudiado, sentía que me rebasaban en conocimiento por mucho. Me sentí fuera de lugar y no lo suficientemente inteligente como para estar ahí. Cabe mencionar que solo éramos cinco. Mis calificaciones tampoco eran las mejores, y mis participaciones en clase nunca eran lo suficientemente buenas.

Me desvalaba casi todos los días, tratando de entender algo que no podía. Me frustraba, lloraba y por más que leía, sentía que estaba leyendo algo en ruso. Saliendo de clases me iba a la biblioteca a consultar libros de nivel universidad (que de poco me servían) para tratar de entender términos y técnicas que no tenía ni idea de lo que trataban. Sufría mis exámenes, y el tiempo que pasaba en las clases se me hacía interminable.

Para cuando inicie mi segundo cuatrimestre, la presión y la depresión que sentía eran insoportables. Había bajado bastante de peso, y mi cara denotaba demasiado estrés y frustración. A diario me repetía que yo no debía estar ahí, que ese sitio no era para mí porque era demasiado tonta para entender lo que los maestros explicaban. Incluso uno de mis profes me dio a entender que era una estúpida, porque dijo que "no sería capaz de explicar bien un artículo". Lloraba demasiado a menudo, y  estaba perdiendo el apetito. Hasta que un día me quebré. Un día, entre lágrimas, me di cuenta de que no me sentía feliz en aquel sitio, estaba demasiado desmotivada, y sentía que no tenía nada más que dar. Decidí darme de baja. Los siguientes meses fueron un suplicio en todos los niveles, y sino hubiese sido por mis amistades...

Total, llegamos al presente y la otra vez escuchaba en las noticias sobre covid, salud, y cosas de inmunología. Y fue en ese momento, mientras entendía lo que decía el narrador, que me dije a mi misma "vaya, si aprendiste algo en la maestría, después de todo" y no saben la alegría que me dio. Por muy básicos que son mis conocimientos he podido entender algunas cosas que previa a ella no lo hubiese hecho, y me da gusto por ello. Me da gusto que, pese a lo mal que me sentía, el conocimiento (o algo de él) pudo colarse en mi cerebro y me hizo aprender, y estoy agradecida por ello.

Ahora que ha pasado cierto tiempo desde ese intento frustrado, me doy cuenta de que aprendí muchas cosas en aquel lugar, y no solo hablo de conocimiento teórico, sino sobre la vida y sobre mi misma. Esta una historia muy resumida de las muchas que pasé en Guanajuato.  Creo que al final, me di cuenta, de que, aunque estudiar esa maestría era una gran oportunidad, me estaba afectando mucho en mi salud en general, y eso es algo que he aprendido a valorar, a tener en cuenta de que si algo está absorbiendo demasiado de ti, hasta un punto que puede llegar a ser riesgoso, quizás debas de meditar si eso en verdad es para ti. Quizás algún día les cuente más historias de mi tiempo por allá, pero por el momento les dejo con esta, esperando que a alguien le ayude. Saludos.

viernes, 2 de octubre de 2020

¿Porque ya no escribo poemas?

 La neta, la neta nadie me hizo esta pregunta, me la hice yo solita el día de ayer porque recordaba que ya tenía que no escribía un intento de poema. Sí. ya sé que la entrada anterior parece precisamente eso, pero la verdad es que no quedó tan bien, creo que he escrito mejores. 

La respuesta es muy sencilla, porque no tengo un muso. Sí, ya sé, ustedes podrán decir que puedo escribirlos para mi misma, pero siento que no es lo mismo. Por ahí he escuchado que dicen que un escritor, o quizás mejor dicho un poeta, hace sus mejores trabajos cuando esta enamorado o decepcionado, y ahorita no me encuentro en ninguno de esos dos estados. Y es que, no es difícil de notar, que los textos que uno escribo cuando no está bajo la influencia de ninguno de esas sensaciones, los poemas pueden parecer que no tienen tanto sabor, que no saben igual.... no brota con la misma enjundia. 

Así que desde el 2018, creo, no he escrito algo que realmente me flipe. Al menos no en términos poéticos. A veces he intentado regresar a los recuerdos en busca de inspiración, pero al parecer esas cenizas ya se han consumido, ya no hay chispa que pueda avivar esas viejas historias. 

Así que a falta de inspiración romántica, me siento aquí y les cuento sobre mis desdichas, o trato de filosofar o hago una crítica a mi trabajo. No digo que nunca vaya a volver a escribir esos "poemas" sino que por el momento no hay inspiración para crearlos. Es como un carro al que se le ha acabado la gasolina para andar, pero que volverá a caminar cuando le vuelvas a poner. Ok, esa fue una pésima analogía, pero espero que ustedes me capten.

Sé que muchos dirán que hay muchos poetas con versos muy buenos que no tratan sobre el amor, lo cual es cierto, y hay unos geniales, como los de Walt Whitman por ejemplo, pero yo que soy una cursi de clóset necesito de esa inspiración rosa para escribirlos. 

Así que solo queda esperar a que mi yo rosa vuelva de donde se ha ido a vacacionar, mientras tanto seguiremos con este contenido. Hasta aquí mi reporte, saludos.

miércoles, 23 de septiembre de 2020

Untitled (XXI)

 A veces solo quiero tu silencio y nada más

A veces solo quiero tu compañía,

Un abrazo que haga menos pesada mi melancolía.


A veces solo quiero tiempo, ese amo que nos rige

y que nos lleva, sin mirar atrás

que ya sabe que tiene la batalla ganada

y que día con día, nos consume más


No pido que me entiendas,

Adentrarte en el profundo corazón humano es muy complicado

Pero con tu amor basta


No te pido más que unas simples palabras

Unas que broten de tu corazón

Que me lleven a sobrellevar el dolor


A veces no queremos nada más que eso.

El acompañamiento, el saber que no estamos solos,

en este Universo.

lunes, 21 de septiembre de 2020

Ser o no ser exigente

 

La otra vez estaba hablando con una amiga sobre su trabajo, me estaba contando que en ese día había tenido una serie de problemas con sus compañeros. Sin embargo, unas de las cosas que más le molestó, fue el hecho de que su compañera, la acusara de ser "demasiado exigente", a mi también me sorprendió, porque aunque ya estoy más acostumbrada a ser acusada de eso, como profesora es muy común escucharlo, siempre me ha parecido una excusa bastante pobre y absurda para no querer hacer bien tu trabajo.

Esa conversación me dejo pensando. Me pregunté en que momento histórico, ser exigente se volvió algo socialmente malo. Es que a veces no entiendo a la sociedad, la neta. Ahorita que tenemos tantas herramientas y tecnología que nos facilitan el trabajo, y que nos debería resultar más cómodo y sencillo hacerlo bien, insistimos en hacerlo mediocre. Pfff.

Me he dado cuenta de que es muy difícil trabajar en México sin comprometer tus ideales, a veces entiendo porque la juventud se va descolorando poco a poco en sus metas y actitudes, porque deja de intentarlo y se somete al sistema. Tristemente vivimos en un país, donde luchar contra ese sistema es demasiado agotador, sobre todo, cuando no encuentras apoyo a tu alrededor. Y lo veo, una y otra vez, cuando sugieres algo y tus ideas siempre son desplazadas por las viejas ideas. Lo veo también, en mis alumnos, que no sugieren, que no proponen, y no porque no tengan las ideas, sino porque ya saben de antemano la respuesta.

Toda idea es un riego, no podemos asegurar que va a funcionar en su totalidad, quizás podamos calcular una probabilidad pero siempre habrá un margen de fracaso. Pero de estas ideas, nuevas y frescas, son de las que nacen proyectos que pueden cambiar el futuro, pero mientras sigamos aferrados a nuestras viejas ideas, a nuestro viejo sistema, es muy difícil que podamos avanzar.

jueves, 17 de septiembre de 2020

Perder para crecer

 Ostia tío, que la he cagado. Lo digo en castellano, porque suena mucho más dramático y a veces hay que añadir ese toque a las entradas. Pero no en verdad, la he cagado, nada mejor que una lección para iniciar este nuevo ciclo. 

El día domingo me la pasé en el drama total pensando en porque la regué y como pude haberlo evitado. Sin embargo después de haberme pasado todo ese día pensando en esa situación pensé que quizás era mi ultimátum para aprender la lección que no había aprendido. Quizás a veces necesitas perder relaciones para crecer. Por que es cuando la cajeteas que aprendes. Es como darte un golpe que te hace abrir los ojos. 

Si hago una retrospectiva, puedo darme cuenta de que en todas las veces en que perdí mi relación con alguien aprendí una lección valiosa sobre mí. Sin embargo, eso no quiere decir que cada vez que sucede sea menos doloroso y fácil de aceptar, porque nunca sabes que parte de ti es la que vas a desvelar y cual es la lección que vas a aprender. 

Ahora me puedo dar cuenta de en que actué mal y qué es lo que debo de cambiar, aunque esto último es quizás lo más difícil de hacer. También me puse a pensar si podía arreglar y si quería hacerlo. Me disculpé en su momento, pero creo que una parte de mi me dice que ya no quiero retomar esa relación, que es tiempo de dejarla (porque al fin y al cabo no llegaba a ningún lado) y que lo mejor es empezar por mi cambio y avanzar. 

Ahorita entré a una fase de autoaislamiento interno en la que estoy viendo como voy a proseguir o que debo de hacer para modificar algunos comportamientos. 

Espero se encuentren muy bien y nos leemos en la próxima entrada. Saludos!

lunes, 14 de septiembre de 2020

La moda Bratz

 


Después de haberme tomado un pequeño break, estamos de vuelta en el blog. Voy a empezar diciendo que esta es la primera entrada que escribo con 33 años cumplidos. WOW. Pero bueno, vamos a entrar en materia. 

Hace apenas una semana volví a Instagram, no es que me haya ido, sino que tenía problemas con el celular, así que no podía usar la aplicación muy bien, pero ya está solucionado. Así que me dispuse a explorar el mundo de IG, para ver que había de nuevo en estos meses que me había ausentado. Para pasar el rato, empecé a jugar con los filtros. O esas "benditas" herramientas que nos disparan autoconfianza, porque aceptemoslo, nos hacer vernos y sentirnos mejor. Comencé a verme con distintos filtros, algunos me ponían pecas, otras me cambiaban el color de los ojos pero la que más me impactó fueron aquellas que prácticamente te cambian las facciones de la cara. Me tomé una foto usando uno de estos filtros, y lo que pensé fue "gracias a IG ahora sé como luciría si fuera una muñeca bratz". 

Sin embargo, también me di cuenta de que estas facciones, se han convertido en el "estándar" de belleza actual, o al menos así lo parece en muchísimas fotos que aparecen en la aplicación. Me di cuenta de qué un gran número de mujeres, lucía como ese filtro que yo había utilizado en la aplicación, pero a diferencia de mi, en ellas parece que el filtro se lo hubiesen aplicado de forma real: labios grandes, pestañas infinitamente largas, piel perfectamente lisa y maquillaje más o menos similar, resaltando los pómulos y con la cara afilada. Miles de fotos lucen una cara tan similar que es dificil notar diferencias entre una y otra. Fue entonces cuando me pregunté, ¿en qué momento se dijeron que estas facciones debían ser el estándar de belleza actual? ¿dónde hubo esa convención?

Cuando yo era una adolescente, recuerdo que me traumaba mucho el tamaño de mis labios. Usar labial no era una opción para mí porque me parecía que todo mundo me vería y dirían que "boca tan gigante tiene esa muchacha", así pasa muchos años, alejándome lo más posible del labial, hasta que un día, ya en la universidad, decidí usar un labial rojo. Pensé que era momento de desafiar mis complejos y me lo puse. Me sentí sumamente incómoda todo el día, pero no iba a sabotearme. Funcionó. Poco a poco empecé a pintarme los labios.

Conforme avanzó el tiempo, y se fueron creando todas estas redes sociales, y comenzaron a aparecer los "influencers" y algunas celebridades, el mundo de la belleza comenzó a dar un giro que yo no notaba mucho en ese entonces, hasta que hace un par de años alguien me dijo "quisiera tener unos labios como los tuyos", me pareció sumamente extraño recibir ese "halago" porque yo luché mucho tiempo contra ese trauma. 

Entonces llegamos al tiempo de Instagram, y me di cuenta de que las personas comenzaron a obsesionarse con lucir de cierta manera, había videos de como hacer tus labios más grandes (con consejos dudosos), trucos de belleza y gente rellenándose los labios con inyecciones, y luciendo prácticamente igual, una tras otra. No, no es que tenga nada en contra de la cirugía plástica, sino más bien, lo que me parece incomprensible, es la obsesión por lucir iguales. La verdad no lo entiendo, ¿porqué?

A veces me parece un tanto irónico que, estando en una época donde se habla mucho de la autoaceptación, se encuentre la contracorriente de seguir un estándar de belleza que impuso quién sabe quién. ¿Será que algún día seremos capaces de evadir la presión social o el capitalismo ya está demasiado insertado en nuestro ADN?

martes, 1 de septiembre de 2020

Casi 33

Hola, como ya se abran percatado, últimamente he tardado en actualizar el blog, y eso es porque he tenido mil cosas en la cabeza y no me ha surgido la inspiración para escribir, así que si no hallo el tiempo o el momento para escribir, decidí hacerlo hoy.

Estoy a unos cuantos días de celebrar mi cumpleaños 33. La neta no puedo creerlo. Treinta y tres, un número místico que encierra tantos significados diferentes. Haciendo una retrospectiva de lo que he aprendido a lo largo de todos estos años, debo decir que si he tenido mucho aprendizaje. Algunas de mis experiencias se las he compartido por este medio, siempre esperando que a alguien más le ayuden o que generen algún debate u opinión.

Ahora que ya me encuentro dentro de la tercera década, debo decir, que la vida no es definitivamente como en los 20's, mis metas, mis ideas, mis pensamientos, e incluso mis emociones han cambiado a lo largo del tiempo. Y seguramente continuarán en constante evolución, porque la vida no es más que un constante cambio, eso ya me quedó claro.

Aprovechando este espacio, quiero dar gracias a los lectores de este blog. Gracias por leerme, por dedicarle 5 minutos de tu tiempo a este espacio, si te ha parado a leer alguna de estas entradas, porque el tiempo es preciado, y agradezco a quien me lo brinda, si has dejado un comentario también lo agradezco.

No quiero hacer una entrada extensa diciendo todo lo que he aprendido en todos estos años, una, porque sonaría muy repetetitiva, otra, porque seguramente  ustedes ya conocen algunas, y también porque al final del año suelo escribir lo que aprendí a lo largo del año. 

Espero que sigan siendo parte de este blog. Les mando muchos saludos.


lunes, 17 de agosto de 2020

Work problems

 Hace unos dos días aproximádamente le comenté a OP que mi trabajo no me gustaba. La verdad me costó mucho aceptar esto pero ahorita estoy en un lapso en el que deseo ser lo más franca conmigo, y la neta es que mi trabajo no me produce felicidad, pero me voy a dar a explicar un poco más. Como sabe algunos, yo soy maestra y me dedicó pues precisamente a eso, a dar clases. Y es precisamente eso, lo que más me gusta de mi trabajo, pero lo que me desagrada a un nivel exorbitante es el trabajo administrativo que ello conlleva. Eso de doblegarte ante un sistema (y sobretodo un sistema educativo fallido, como el de mi país) no es de mi agrado. Aunque llevo poco dentro de este sistema, debo decir que, desde incluso antes, no me agradaba para nada su "metodología de trabajo", y es que si algo he visto, es que parece importar todo, menos, precisamente, la educación.

Me frustra muchísimo el no poder hacer entender a nadie, o a casi nadie, que este sistema no funciona, al menos ya no para este siglo, ni mucho menos para las nuevas generaciones. Aceptemos el hecho de que, el sistema se esta volviendo obsoleto, por no decir arcaico, y que no esta comiendo el mandado. En una era donde parece predominar la tecnología y la ciencia, tal parece que la educación parece rehusarse a seguir el paso. No, no me refiero a que las clases en línea son lo mejor, porque ese tema lo discutiré posteriormente, sino más bien al hecho, de que los aprendizajes y los programas que tienes que enseñarles a tus alumnos parecen sacados de la Edad Media.

Siempre he pensado que nuestro sistema educativo no tiene esencia propia, es más bien, un collage apelmazado de numerosas corrientes y propuestas de otros sistemas, y que falla rotundamente al momento se aplicarlo. Como buena rebelde, yo he buscado la manera, de revelarme contra el sistema, y no, no me refiero a hacer huelga, o un plantón, porque siempre he pensado que la verdadera revolución esta en nuestras mentes. Así que trato de plantear nuevas ideas, o hacer propuestas distintas, todo siempre para escuchar un rotundo no. Es muy difícil luchar contra un sistema que esta demasiado cansado, demasiado corrompido, demasiado fracturado, demasiado cerrado. Es como si cada vez que intentara florecer, lo arrancaran de raíz. Es justo ahí, cuando me doy cuenta de que un sistema que se cierra a las ideas esta completamente perdido, y me da mucha tristeza.

Sé que el trabajo administrativo es necesario, pero a veces parece que se sobrepone a lo que verdaderamente nos atañe que es la educación. La escuela es el lugar donde deben florecer la mentes, las ideas, la creatividad, la imaginación. Son los cimientos hacia una nueva civilización. Pero no, eso no es lo más importante, lo más es importante es llenar tus veinte mil formularios donde te preguntan lo mismo una y otra vez. 

Quizás el problema sea mío, por querer luchar por algo que hace mucho tiempo que nos dejó.

martes, 11 de agosto de 2020

Nothing's gonna stop us

 

Últimamente no me ha dado por sentarme a escribir en el blog, creo que otra vez me estoy secando de ideas. Jajajaja. Así que para no dejarlo tan a la deriva, los dejo con esta canción ochentera que inmediatamente me pone de buenas en cuanto la escucho. Ah, los 80's y su onda estrafalaria.

domingo, 2 de agosto de 2020

Dark

Para variar un poquito en las entradas del blog, hoy voy a hablar de la serie de Netflix llamada "Dark". Como ustedes ya se habrán dado cuenta, si es que han leído varias entradas del blog o lo han seguido por algún de tiempo, el tema del tiempo y como ocurre, es algo que me genera mucho interés, y es un idea que habita constantemente en mi mente y que me pone a reflexionar. Sin embargo, cada vez que veo películas sobre viajes en el tiempo, termino decepcionada la mayoría de las veces. Siento que muy pocas obras, ya sean películas o libros, muestran el tema del tiempo de una manera "novedosa", o que genere un debate profundo sobre él a nivel popular, sin embargo, me llamó la atención que precisamente esta serie, se haya vuelto tan famosa por generar un debate respecto a esto. 

Comencé a ver Dark por recomendación de un conocido, pese a que ya había escuchado hablar de ella, me rehusaba a verla porque la consideraba muy "mainstream" y casi todo lo que se vuelve así, termina decepcionándome. Así que, aprovechando la cuarentena, y el interés que me causo el generar un debate de este tema (que no ha ocurrido, por cierto) me llevó a ver la serie. La empecé a ver justo unas semanas antes de que se estrenara la tercera y última temporada, y realmente agradezco haberla visto así, de manera corrida, que esperar un año entre cada una, particularmente porque estoy segura de que hubiese olvidado partes de la trama. 

Debo decir que Dark me pareció una muy buena serie. Es entretenida y te mantiene en el suspenso necesario. ¿Es complicada? Yo diría que no, pero si debes ponerle cierto grado de atención para no revolverte entre tantos personajes, sobre todo porque vas viajando en el tiempo, y los personajes obviamente se ven más jóvenes o más viejos dependiendo de la época. Entonces en ese aspecto si me parece que le debe uno prestar atención.

Otra cosa que quiero apuntar es que antes de que se estrenara la tercera temporada ya me temía el final. Y tal como lo predije, al final de la serie, vemos que la única manera de desenredar el bucle es borrando todo lo que vemos en la serie. Y eso es precisamente lo que me decepciona de las películas sobre viajes en el tiempo, que terminan borrando lo que sucedió y me siento estafada por todo el tiempo que invertí viendo ese proceso. Eso ya lo hemos visto en películas como X-Men, entonces no es particularmente novedoso. El final, era, hasta cierto punto, predecible.

Lo que me gustó de la serie, es la forma en retratan nuestra obsesión por el pasado y el querer arreglar las cosas. Es cierto, estoy segura de que si hubiera una máquina del tiempo, la mayoría iríamos a un punto de nuestro pasado para tratar de arreglar nuestro presente, muchas veces sin imaginar las consecuencias que eso traería. Probablemente terminaríamos haciendo un gran enredo como en Dark, donde al intentar cambiar las cosas, al final terminan repitiéndolas una y otra vez, en un gran bucle de tiempo que parece no tener fin. Y es que una vez más, nos muestra, la gran dificultad que tenemos para cerrar ciclos, para generar un cambio en nuestras vidas y seguir adelante. Y quizás al final sea parte de nuestra naturaleza.

Yo le doy un 8/10 y ustedes ya la vieron? que les pareció?

martes, 28 de julio de 2020

Preguntas hipotéticas...

Recuerdo que antes, cuando andaba por aquél lugar, me sentía triste. El aire tenía un aire a nostalgia demasiado pesado, pero me he dado cuenta de que no era así. Esa era mi nostalgia. Mientras caminaba por aquél lugar, me preguntaba cuantas veces habías pisado tú aquellas calles. El saber que tus zapatos habían pasado exactamente por aquellos adoquines, aquellas piedras, que habías estado allí en algún momento me hacía sentir realmente triste. Y aún así, deseaba que te aparecieras de la nada, como un fantasma, y que pudiera contemplarte una vez más. Cabe mencionar que eso nunca se cumplió. Era como si me sintieras, pero mientras yo te anhelaba, tu te salvaguardabas de mí. Que irónico. 
Y mientras evocaba ese recuerdo me pregunté que haría si algún día nos encontráramos de nuevo. ¿Actuaríamos como si nada hubiese pasado? ¿ Nos ignoraríamos? ¿Nos saludaríamos cordialmente e intercambiaríamos como nos ha ido en la vida? ¿O simplemente nos saludaríamos desde lejos y dejaríamos que todo lo que vivimos flotará en el ambiente, y por unos instantes estaríamos viviendo ese pequeño microuniverso que es solo nuestro y que nos pertenece? ¿Qué haríamos? 

No lo vida esta llena de preguntas y respuestas hipotéticas, muy pocas veces tenemos la certeza de que las cosas "van bien" y nunca la tendremos sí las cosas pasaron porque "así tenía que ser" o simplemente lo hicieron de acuerdo a la ley de causa y efecto. Lo único que tenemos es una vida llena de hipotésis, tomando decisiones pero nunca sabiendo a ciencia cierta si eso fue lo mejor. Tal parece que a la vida le gusta desvelar un misterio para después sorprendernos con otro.

Yo a veces trato de responder a mis preguntas hipotéticas, como esta, que ha aparecido en mi mente, y me ha hecho divagar un poco. Pintó diferentes panoramas, pero lo cierto es que las cosas nunca pasan como las imaginas, porque hay tantos factores que son ajenos a ti. Y quizás la mera suposición de reencontrarnos no es más que una hipotésis, que quizás nunca se vuelva realidad.

jueves, 16 de julio de 2020

La familia darks

Cuando me llegan a preguntar como imagino mi futura familia, siempre viene a mi mente una imagen de la familia Addams. Creo que mi respuesta no es para nada una sorpresa, yo que soy darks, imagino una familia darks, y creo que ellos son una representación perfecta. La estética, la casa gótica y el toque de locura creo que reflejan bien lo que yo imagino. Ahora solo falta encontrar a mí Homero, así que dejaré esto por aquí, por si algún día se aparece por este blog y nos reconocemos como amor de nuestras vidas.


            






lunes, 13 de julio de 2020

Ya no hablamos

Como ya les había contado en entradas anterioes, este período de aislamiento social me ha puesto en modo reflexivo, y la verdad es que si me ha ayudado a darme cuenta de varias cosas sobre mi misma, y también ha estado modificando mi perspectiva en otras tantas. Una de ellas han sido mis "antiguas amistades", la verdad es que es parte de la vida e ir perdiendo contacto con algunas personas a lo largo del camino, supongo que es normal, porque la vida de cada persona va cambiando, y sus prioridades e ideas también lo hacen. Entonces llega un punto en el que te das cuentas en el que ya no tienen nada en común, y es mejor dar por terminado esas relaciones.

O a lo mejor soy yo, que estoy llegando a un punto de mi vida en la que ya no estoy interesada en invertir en amistades o relaciones que ya no me aporten nada, que no me hagan crecer como persona, o que me motiven, o que den otros puntos de vista. Sinceramente todo eso me da mucha flojera, el invertir tiempo y en energía en personas que no lo valoran o que no le ponen el mismo empeño es al final una pérdida, y no lo digo esto en un modo grosero, sino más bien es un modo comprensivo. Yo creo que en algún momento otras personas han considerado lo mismo conmigo, que nuestros puntos de vista o modo de vida es tan distinto que prácticamente no los culpo por romper relaciones conmigo o dejarme de hablar. Entonces lo que hice fue ponerme a eliminar contactos de mi facebook y de mi celular, algunos me dicen que los deje ahí como bulto, pero sinceramente yo no soy partidaria de eso, A veces la gente se fija en tu vida para tener tema de conversación, y pues eso no esta chido. 

Lo he mencionado mucho en este blog, y cerrar ciclos es un proceso importante que uno tiene que aprender, además de que soy de las que piensan que para que entren nuevas cosas a tu vida, tienes que dejar ir aquellas que ya no funcionan. 

La otra vez me puse a platicar con mis primas, de todo un poco, de política, de anécdotas, del pasado, del futuro y de un sinfín de cosas, y la plática se me hizo tan refrescante, porque eso de estar hablando de chismes o de los mismos temas de siempre se torna aburrido, así que cuando se discuten ideas, se me hace una conversación  más fresca. A veces creo que ya estoy envejeciendo y me estoy amargando. En fin, saludos!

viernes, 3 de julio de 2020

El poder de los recuerdos...


El día miércoles me dispuse a iniciar un curso que me indicaron por parte del trabajo. Me di cuenta de que necesitaba una libreta para tomar notas, y me dirigí hasta un anaquel donde tengo guardadas algunas que todavía tenían hojas en blanco y que podían reutilizarse, saqué una al azar y me di cuenta de que era una de las que había llevando durante la maestría en Gto, comencé a hojearla, y mientras lo hacía, como si fuéramos un par de clavadistas sincronizados, los recuerdos comenzaron a desbordarse por mi mente. Uno tras otro y sin parar, aparecían imágenes, imágenes muy breves pero muy claras de muchos momentos que viví allá. Para los que han leído este blog, sabrán que mi época en Gto fue un tanto tormentosa, así que nos les mentiré, sentí ganas de llorar, pero no lo hice. Pensé que quizás sería mejor idea y dejar los recuerdos donde pertenecían, guardados en ese anaquel. Sin embargo, porque una parte de mí me dijo que tenía que sobrellevarlo, junto con el presente, porque así sería por siempre.

Quizás el efecto fue así, dado un suceso que pasó un par de semanas. Es extraño como a veces, de la nada, tu pasado se vuelve a hacer presente, aunque realmente nunca nos deja del todo. Después vi la foto de un compañero que vive allá, y que puso una foto de la ciudad, resaltada por sus luces en la noche, preciosa, antigua, con el aire particular que la caracteriza. Juró que cuando vi esa foto podía sentirme ahí, de nuevo, como cuando vivía allá. Después, aprovechando la melancolía, me puse a escuchar canciones que me recordaban aquél tiempo, que a veces parece haber ocurrido hace muchísimos años, y otras tantas, parece haber ocurrido ayer.

Finalmente, como última idea nostálgica de la noche, se me ocurrió resucitar mi antiguo teléfono, aquél que me acompañó durante aquella etapa, y que se convirtió en un preciado tesoro. Quería recuperar mis recuerdos de forma palpable, así que me dije que el día de mañana lo intentaría. Y aquí estamos hoy, escribiendo esta entrada después del experimento. Lo conecté, y para mi sorpresa, prendió. Con un poco de nervios, y después de dar un profunda exhalación, accedí a él y comencé a buscar lo que quería. Y allí estaban, las fotos de esa época.... las miré un buen rato y me dije que ya no me parecía, eran imágenes de otra vida. Me pregunté como sería la vida de algunas personas que aparecían en esa foto, tres años no parece mucho tiempo y sin embargo a mí me parece que han transcurrido como mil. Las guardé en mi nuevo teléfono, a veces es bueno echarle una vista al pasado.

De repente me pongo a pensar que hubiese pasado si... como sería ahora? No lo sé, nadie lo sabe. O tal vez si, tal vez esa yo exista en un mundo paralelo, pero eso no puedo saberlo. A veces me parece extraño, como ciertos objetos tienen tanto poder sobre nosotros, es como si tuvieran la magia para revivir el pasado, o quizás seamos nosotros, imprimiendo esos recuerdos en ellos. 

Y es que hay noches llenas de recuerdos, hay noches en que el tiempo retrocede, y parece que puedes casi palparlos. Hay noches donde el poder de los recuerdos se hace presente.

viernes, 19 de junio de 2020

Amistad tóxica?

Nada como una salida con tus amigos para agarrar inspiración y escribir en el blog. La verdad es que a veces me da eso que llaman "bloqueo del escritor" y ya no sé que contarles, pero gracias a la salida de ayer creo que tengo algunos temas para próximas entradas. Pero empecemos con lo que me está burbujeando por dentro en este momento. 
Lo que comenzó como una salida normal entre una amiga y yo, terminó en una discusión. No sé si ya lo he escrito antes, pero yo me considero una persona muy pacífica. La neta no me gusta discutir por nimiedades, he llegado a un punto de mi vida en el que valoro mucho mi paz interna y evito meterme en líos absurdos, me he convertido en una persona muy práctica, brindo mi consejo a quién me lo pide y si lo quiere seguir bien, y sino también, sus razones tendrá, y evito asimismo, hacer míos problemas que no lo son. Y es precisamente esto último por lo que la salida terminó en su discusión.

Recuerdo que cuando íbamos en la primaria era muy popular el "córtalas o pégalas" y eso se aplicaba muy a menudo a cuando te llevabas con alguien, que a tus demás amigos no le caían. No te podías llevar con fulanito porque entonces te excluían del "grupito". Pensar que todavía existen ese tipo de actitudes años después se me hace de lo más inmaduro posible. No, no voy a fingir diciendo que todas las amistades de mis amistades me caen bien, pero tampoco las hago elegir entre ellos o yo. Simplemente les pido que respeten el hecho de que si a mi no me cae bien alguien, no me obliguen a llevarme con él. Y la mayoría lo ha entendido.

Sin embargo, tal parece que mi amiga con la que salí ayer no. Por más que intenté decirle que debía separar las cosas y que si una amiga mía no le simpatizaba, lo respetaba, y que ya no hablaría de ella para evitarnos problemas, pero nunca entendió mi punto y siguió despotricando en su contra. Y es que eso de que te pongan entre la espada y la pared, simplemente no me agrada.

Lo único bueno de esta discusión es que me hizo fijar mi atención sobre algunas cosas de mi misma, y que yo también tengo que revisar y meditar sobre ello. Creo que tener un amistad tóxica en por lo menos una de las experiencias que debes vivir en tu vida, y creo que es algo por lo que todos pasamos, aún así, no la creo tóxica, pero quizá en algún momento, cuando ya no estemos alteradas, lo podamos hablar.

jueves, 11 de junio de 2020

Racismo


Dado los tiempos que estamos viviendo, me pareció que este será un buen momento para reflexionar sobre este tema. Siempre he sentido curiosidad el hecho de que los mexicanos estemos tan traumados por no ser blancos. Muchos dirán que no es así, pero creo que es bastante visible que esta idea permea en todos los sectores de nuestra sociedad. Supongo que todos hemos escuchado a alguien que nos dice, cásate con un güerito(a) para mejorar la raza. Y yo me pregunto, que hay de malo, en ser moreno? Porqué ser blanco o güero te hace mejor automáticamente?

Desde que tengo memoria, yo nunca me he sentido mal por mi color de piel. Nunca he deseado ser güera, ni tampoco espero que mis hijos lo sean. La neta yo estoy muy conforme con mi color de piel, pero si me he topado con amistades que luego no quieren usar determinado color porque "se ven más prietas" o se cubren del sol porque ya no quieren ponerse "prietas" o "negras". Cada vez que escucho esos adjetivos en un contexto discriminatorio me pone de malas. De hecho, hace un par de días, estaba hablando con una amiga y le dije que ya necesitaba salir para ir a tomar el sol a la playa. ella me dijo que si ya estaba cansada de ser güera, y lo dijo en un tono sarcástico, y le dije que a mi no me molestaba mi color de piel en lo absoluto, a lo que ella respondió: en serio? En serio nunca has querido ser güera? Yo le dije que no, que agradecía no tener ese trauma. Dejamos de hablar de eso.

Lo que si me desconcertaba, desde que era muy chica, era el hecho de que no encontraba modelos con mi tono de piel en las revistas de moda, siempre, siempre salían chavas güeras de ojos de color, y siempre me preguntaba porque no ponían alguna así. No me sentía representada en lo absoluto. Es importante la representación? Si, totalmente. Ahora me gusta ver que la presión social ha hecho que en los comerciales y en las revistas, aparezcan diferentes tipos de personas. Es como sentirte parte de, o no como un marginado. Yo de hecho aplaudí cuando pusieron a Yatlitza Aparicio en la portada de Vogue México. 

No solo veía la falta de representación en las revistas, sino también en las novelas. En todas las novelas que vi de adolescente, puede decir que quizás dos, tuvieron una protagonista cercana a una tez morena, de ahí en fuera siempre era gente blanca. Pero las actrices morenas siempre salían de chachas. 

Incluso con algunos chicos que he salido, su "ideal" siempre ha sido la típica chica güera, rubia y de ojos de color la que les gusta (de lo más cliché, por cierto) y yo me pregunto, entonces porque rayos salen conmigo? La verdad, incluso a veces, cuando veo las fotos de su ex, o de sus nuevas novias, yo me he llegado a sentir como frijol en el arroz, supongo que de todas formas, estaba destinado al fracaso.

Claro que eso no quiere decir que no respete los gustos de cada persona, pero la verdad es muy difícil que alguien te diga que su estándar de belleza es una chica negra o morena. Es muy difícil que su ideal de "belleza" no sea alguien como Scarlett Johansson, que no digo que no, la chica es guapísima, pero a veces siento que tener esos gusto es más un cliché social que un gusto propio. En fin. 

Lo cierto es que en pleno siglo XXI, seguimos en una mentalidad como desde hace 100 años o más de retraso. Ojalá en algún momento, nuestro pensamiento también evolucione.

lunes, 1 de junio de 2020

Pensamientos Random

Hoy les compartiré una serie de pensamientos que he tenido a lo largo de esta ya extensa cuarentena, no tienen ningún orden en particular. Lo hago así porque creo que ninguna me inspiró lo suficiente como para hacer una entrada completa.

Me tomé otro break de Facebook
La verdad es que esto cada vez se vuelve más y más constante en mí, sinceramente llega en el punto en el que facebook me parece un tanto "chocante" y lleno de falsedad e hipocresía, no no debería sorprenderme, de todas formas no puedes esperar mucho más. Otra cosa porque la que decidí tomar un descando, es que la verdad, como dice OP, ya estaba publicando puras tonterías y ya empezaba a considerar fb como una especie de psicológo virtual, y la neta, eso no está chido. Entrar a fb a desahogarte no es una buena idea, así que antes de seguir publicando más y más mensadas, decidí que era tiempo de cerrarlo. Solo me quedé con mi fb de trabajo, el cual tengo que tener por obvias razones, pero lo bueno de éste es que me limita (o mejor dicho, me limito yo) a publicar cosas que no sean personales.

Entré en un período depresivo
Esto tampoco es novedad, ya saben que suelo luchar constantemente con mis episodios depresivos, aunque este más bien lo consideraría un período de altibajos. Decidí que también me tomaría un break de WhatsApp y solo hablo con muy pocas personas, y también me limité a subir estados personales (cosa que también ya estaba haciendo, y pues en un momento de lucidez, reaccioné y me dije, que carajos estás haciendo? Así que ahora mantengo conversaciones cortas, o solo me dirijo con aquellas personas que siento la necesidad de conversar y que creo que tendrán la paciencia para escuchar y soportar mi letanía depresiva.

Pensé en mi boda
Jajajajaja la neta no sé que esta pasando, pero supongo que al igual que la mayoría de las mujeres, también de vez en cuando tengo mis ratos en que me gusta imaginar mi boda. Y es que, aunque si me ha pasado por la mente la idea de la gran fiesta, y el beso al atardecer, la verdad es que a veces también me pilla la idea de que me gustaría casarme el día que me brote las ganas de hacerlo, claro y que mi pareja también quisiera, obvio. Pero me refiero a que esas ganas nacieran solitas, que un día por la mañana depertáramos y dijéramos: no te apetece casarte hoy? Ya sé que es una idea loca, porque tienes que hacer ciertos trámites y apartar un día, pero a veces creo que sería una idea divertida.

Pensé en abrir un canal de You Tube
La verdad esta idea aún sigue flotando por mi cabeza, pero no me he decidido a hacerlo. La verdad es que me da pena, pero al mismo tiempo, siento la necesidad de desahogarme e intercambiar ideas con más personas, no lo sé, ya veremos que pasa.

martes, 19 de mayo de 2020

Untitled (XX)


Y de repente apareces en mis sueños,
Con toda tu maldita fuerza
Yo me despierto alterada, con la respiración entrecortada
y una punzada en el corazón
Que injusticia tener que soñar contigo,
cuando tu sueñas con alguien más
No es que te piense, es que te llevo dentro
Si no te pienso, entonces con qué derecho te apareces en mis sueños?
Es que acaso debo seguir pagando una cuota a tu recuerdo?
Si pudiera llevaría este caso a juicio, aunque sé de antemano, que ya lo llevo perdido
Porque ya tiene mucho tiempo que acepté, que en este mundo no estaremos
Pero aun apareces con toda tu violencia, como el trueno que anticipa la tormenta
Y aunque por la mañana te desvaneces, tal parece que tienes poderes
Porque al disiparte en el aire, me permeas la piel y la mente
Y yo le pido a los dioses, que me levanten la sentencia
Que tu ausencia me sea indiferente
O que me concedan tu presencia para siempre
Sea como sea, tu ganas y yo pierdo
Estés o no, yo ya te llevo en el alma.

viernes, 1 de mayo de 2020

About Time


En esta ocasión quiero hablarles de una película que vi, hace ya algunos meses pero que hasta hoy me sigue poniendo a reflexionar. Antes de proseguir, les pido que si no la han visto, no continúen leyendo, ya que hablaré de temas esenciales en la película, si al contrario, son de los que no les importan los spoilers, o no la verán pueden continuar leyendo esta entrada. 

"About time" o "Cuestión de tiempo" como se titula en español, es una película que me fue recomendada por un compañero hace tiempo, de hecho ya tendrá un par de años que me la recomendó, pero como no había tenido la disposición de verla, la agregué a mis lista de películas pendientes (si tengo una lista, alguien más o soy la única). Un buen día la vi en Netflix, y como no tenía nada que hacer, la vi. Aunque la película me gustó, no la siento como una de mis películas favoritas, pero sin duda es muy buena por los temas que toca, que aunque no son novedosos si me pusieron a pensar. Ahora puedo entender porque mi compañero me la recomendó.

La premisa es simple: la película trata sobre un chico que puede viajar en el tiempo, el dato curioso es que solo lo pueden hacer los varones de esa familia al cumplir cierta edad. Obviamente al principio vemos a este chavo, visitar su pasado, explorándolo y haciendo un par de ajustes. Con el avance de la trama, vemos como va aprendiendo lecciones y como van cambiando las cosas. Lo que a mi, particularmente llamó mi atención fue lo siguiente:

El viaje al pasado. Sin duda alguna, el viajar al pasado es algo que como humanos nos llama, yo creo que si tuviésemos una máquina del tiempo, todos, sin excepción, regresaríamos al pasado para tratar de arreglar ciertas cosas y para revivir buenos momentos. Los humanos llevamos esa neecesidad de preguntarnos constantemente "que hubiese pasado si?" y vivimos en una constante búsqueda de respuestas en él. Incluso, si pudiéramos ver nuestro futuro, viajaríamos al pasado para cambiar alguna cosa que no nos gustara.

Una de las situaciones que me pareció interesante es, que en la película, el chico conoce a una chica que le gusta mucho. Convive por primera vez con ella, y al final ella le dice que no le puede corresponder, él, regresa al pasado e intenta enmendar lo que hizo mal con ella, pero igualmente ella lo rechaza. Y es eso precisamente lo que llamó atención, a veces pensamos que si arreglamos tal o cual cosa, las cosas con una persona serían diferentes, y sin embargo, no nos ponemos a pensar en que quizás, simplemente hay cosas destinadas a no ser. Por más viajes en el tiempo que pudiéramos hacer, podemos cambiar nosotros, o nuestros acciones y errores, pero no podemos cambiar lo que la otra persona siente.

La otra cosa que llamo mi atención es la relación que tiene el protagonista con su padre. Eso me llegó. En algún momento, el chico se da cuenta de que ya no podrá viajar en el tiempo, y ya no podrá ver a su padre (el cual fallece en el transcurso de la película), su última charla, me conmovió. Y es que tarde o temprano, nos tenemos que dar cuenta de que no podemos vivir atados al pasado, que por más hermoso, o lo bien que nos haga sentir, debemos cerrar ese capítulo en nuestras vidas y seguir adelante.  Sin embargo, entender esto no cuesta, y es una de las lecciones (a mi parecer) más difíciles que debemos aprender en nuestra vida. 

Los humanos somos muy aferrados a nuestro pasado, quizá porque ya lo conocemos y sabemos donde estamos parados, a diferencia del futuro que es incierto. Y eso lo podemos ver ahora. Apenas leí una frase en fb que rezaba "llevamos días viviendo de recuerdos" y vaya que sí. Cierro diciendo que les recomiendo esta película, porque lo único que sabemos  es que no sabemos cuando van a ocurrir las cosas, todo es, al final, cuestión de tiempo.

domingo, 26 de abril de 2020

Crisis de la mediana edad


Hace unos pocos días  entré en una "crisis de la mediana edad", y aunque fue un período corto (2 días, efectos de la cuarentena, ya saben) me he puesto a reflexionar en eso. No se porqué, pero hay ciertos períodos en que uno pasa por esto. Lo mío fue repentino, de la nada, mi cerebro comenzó a bombardearme con preguntas y comentarios realmente desagradables: "Qué estás haciendo con tu vida? Mira ya todos los de tu alrededor se están casando y tu no? Porqué? Quizás porque algo está mal contigo, deberías tomar terapia. Tal vez eres muy inmadura, o estás muy gorda. O ya sé, porqué no te haces un examen de fertilidad,quizás no puedes tener hijos y tu ni en cuenta" Pensamientos de este tipo aparecieron en mi cabeza, y me hundieron en una corta depresión. Comencé a hacer una lista mental de todas las cosas que pensaba que estaba mal conmigo, y fue realmente un episodio frustrante. Sin embargo, y para mi buena suerte, comencé a tener mucho trabajo y mis pensamientos comenzaron a enfocarse en eso. Mi mente comenzó a obsesionarse con eso, en vez de atacarme con sus cosas desagradables.

Sin embargo, ayer me agarró el pensamiento reflexivo post crisis. Empecé a preguntarme que era lo que realmente quería. De repente tuve la idea de que quizá me estaba obsesionando demasiado con el "querer ser como todos los demás" y estaba dejando de lado mis anhelos. Aclaro, que no es que no quiera formar una familia o casarme, porque si quiero, pero por el momento no ha llegado la persona con la que quiera hacerlo. Quizás todo esto se despertó, porque ayer estaba viendo un video en el que la chica mencionó una frase que penetró mi mente y me despertó toda esta autoreflexión: "it's not about you, it's about fit" y se refería precisamente a eso, en que muchas veces nos enfocamos en todo lo que esta mal con nosotros pero muchas veces es cuestión de que simplemente con las personas anteriores que lo has intentado y no ha funcionado es porque no encajan. Y eso no se puede forzar.

En cuanto a lo de tener hijos, a veces me entra la preocupación por la edad y todo eso, pero luego me pongo a pensar en que, en este tiempo en el que vivimos, hay muchas formas de tener hijos. Y realmente, yo creo que ese es un sentimiento que te debe de brotar desde lo más profundo de tu ser, porque es compromiso demasiado grande. A mí, en lo personal, no me gustaría ser mamá solo por sentir que debo cumplir con una obligación, sino porque creo que eso te debe brotar con mucha fuerza. Y no sé cuando vaya a suceder eso, quizás mañana, o el siguiente mes, o el siguiente año  ya sienta esa fuerza poderosa que me lleve a convertirme en mamá. Pero no lo sé, aun hay tantas cosas que quiero hacer...

Finalmente, me pregunté: Haner, qué es lo que te motiva a partirte el lomo en ese trabajo que no te gusta del todo? Qué te hace soportar el lugar en el que éstas y que no te gusta? La respuesta fue muy simple, viajar. Eso es lo que prácticamente me hace sobrellevar muchas cosas. Cuando tengo oportunidad, me pongo a planear a dónde será mi próximo viaje, me meto a google y busco todos los lugares que quiero visitar y como llegar a ellos. Incluso en Instagram, en la sección de guardados, almaceno fotos de los lugares que algún día quiero visitar. Me imagino yendo a ellos, la ropa que usaré y las personas que podría tener. Y es que los viajes que he hecho me han cambiado la vida. Creo que una vez que los hago, me pongo a pensar en todas las cosas que aprendí. Viajar es mi gran amor, como lo dijo Liz Gilbert en su famosa memoria, no importa las dificultades que me ponga de por medio, si tengo que levantarme muy temprano, si tengo que dormir muy poco o en lugares incómodos, si implica cansancio... allí estoy, dispuesta a vencer algunos miedos (como volar por ejemplo) con tal de llegar a ese lugar.

Viajar me ha cambiado en muchos aspectos y me ha permitido conocer gente con la que aún mantengo contacto. Gente que jamás habría conocido si nunca hubiese dejado mi zona de confort. Recuerdo que, cuando me fui a vivir a Guanajuato, una de mis alumnas me dijo: Profesora, me alegra que se vaya, pero sé que no volverá a ser igual. Dicen que las personas que se van (de viaje)  nunca son las mismas que cuando regresan. Y vaya que tenía razón.

miércoles, 15 de abril de 2020

(Neo) Feminismo IV


Creo que desde muy chica fui feminista, aunque claro, ni siquiera sabía que existía esa palabra ni mucho menos en que consistía serlo. Recuerdo que, yo solía ver mucho la tele antes (ya saben las caricaturas y todo eso) y cuando pasaban un comercial donde se promocionaba algún producto para hacer la limpieza o la comida, siempre me preguntaba porque lo hacían las mujeres, yo me cuestionaba porque no lo podían hacer los hombres, di había alguna condición biológica por la cual ellos no podían barrer, trapear, cocinar, planchar el baño, etc. Yo observaba que teníamos la misma estructura física y sin embargo nunca vi ni un solo hombre que apareciera haciendo alguna de estas tareas. Muchas veces pensé en preguntárselo a mi mamá, pero por alguna razón sentía que era "incorrecto" hacer ese tipo de preguntas.

Cuando llegué a la adolescencia, creo que ya me identificaba un poco más como una feminista. Recuerdo que me desagradaba profundamente cuando mi mamá me decía que tenía que actuar "como señorita" y me preguntaba porque ciertas actitudes me estaban vetadas a mí, pero no a los hombres. No sé, no me gustaba que no se me permitiera ciertas cosas solo por el simple hecho de ser mujer. Otra cosa que me molestaba mucho, eran los anuncios de una determinada marca de cerveza (creo que era la Tecate) porque me parecía que agredían a la mujer, y eran sumamente machistas. Claro estoy hablando de hace años.Y no hace tanto también, me tocó laborar en una empresa donde todos los jefes eran hombres y a los mujeres "no se les permitía", y eso quedó claro en muchas ocasiones, ascender a un puesto de esos. En fin, ejemplos sobran.

Poco a poco, fui leyendo e investigando y mi formé una idea propia de todo esto, y eso ya lo expresé en entradas anteriores, así que ya no voy a ahondar en eso. Lo que sí debo decir, es que es una lástima que llamarse "feminista" en estos tiempos sea mal visto, y no puedes iniciar un debate sobre el tema sin que inicie una guerra de comentarios. El feminismo se ha convertido en algo tan controversial como la religión, el aborto y la política. Al final yo siempre he sido de la idea de que es más sano tener tu propio punto de vista y no dejarte llevar por la propaganda.

Un saludo a todos!

viernes, 10 de abril de 2020

Untitled (XIX)


Sacarte a alguien del corazón es muy difícil, es quizás una de las cosas más difíciles que tendrás que aprender a hacer.
Te llevará coraje, porque decidir irse nunca es fácil
Necesitarás fuerza de voluntad para no regresar.
Pasarás por mucho dolor.
Te costará muchas noches en vela, llenas de preguntas pero con muy pocas respuestas.
Te costará muchas lágrimas, y los hubiera se meterán en tu cabeza.
Querrás regresar el tiempo, pero debes aceptar que eso es imposible.
Justificarás, te culparás y te enojarás.
Llegarás a pensar que una segunda oportunidad es viable, aunque sabes que solo te engañas a ti mismo.
Perderás el apetito.
Todo te recordará a esa persona por un tiempo.
Pero un día, te darás cuenta de que ya no duele tanto como al principio, y comienzas a retomar tu vida.
Limpias, ordenas, sanas y no me refiero a un lugar, sino a ti mismo.
Aprendes.
Y después de un tiempo, recuperas tu equilibrio.
Estás listo para volverlo a perder, cuando haya alguien dispuesto a perder el suyo contigo.

*A quién necesite leerlo

lunes, 6 de abril de 2020

Camino a Guanajuato


Hace unos días, en mi mente floreció un pensamiento, el de volver a Guanajuato. Pero antes de seguir y contarles a que me refiero con "volver", creo que debo de dar un poco de contexto. Estuve viviendo en Guanajuato capital por un período muy corto de tiempo, por aproximadamente seis meses (eso fue reciente, como hace dos o quizás tres años) , que en aquél momento se me hicieron muy largos. Creo que de alguna manera siempre he tenido una especie de conexión con ese estado, aunque nunca lo había visto de esa manera. Pero los caminos de la vida siempre son un tanto misteriosos.

En Guanajuato capital pasé algunos momentos más tristes de mi vida, y también tuve también, muy buenos momentos. Sin embargo, después de dejarle y regresar a casa, me dije que no quería volver allí hasta después de mucho, mucho tiempo. Cada vez que recordaba aquél lugar, o miraba alguna fotografía de allí, los recuerdos me pasaban por la mente como una avalancha, y solía sentir una punzada en el corazón, así de fuertes eran los recuerdos, así de intenso era el dolor. Pero la vida cambio, y uno mismo cambia, y después de un buen rato te das cuenta de que al ver una foto ya no sientes tristeza o nostalgia, sino más bien, veo una foto y digo "no manches, que chido lugar" como cualquier turista que esta planeando un viaje. Ya no hay punzada, la herida ya no duele. Es como si de alguna manera, mi mente se hubiese reseteado.

Eso sí, debo confesar que mientras estuve allá, nunca conocí nada. Nunca pise el teatro Juárez, ni me tomé una foto en el mirador, ni entré a una iglesia, ni me subí al funicular. No hice absolutamente nada de eso, y me extraña porque son cosas que admiraba de lejos, pero que por alguna extraña razón no me atrevía a entrar. Recordando todo eso fue que mi mente me dijo, bueno quizás sea tiempo de volver.Pero voy a hacer una aclaración, Quiero volver no para someterme a recuerdos tormentosos, sino más bien, lo estoy viendo como una especie de liberación, de catarsis, de perdonarme muchas cosas a mi misma, Es una forma de hacer las pases con mi pasado, con mi antigua yo. Quizás algunos piensen que es innecesario, que quizás con olvidarlo y perdonarse esta bién, pero es algo que floreció en mi mente.

¿Cuándo iré? La verdad es que no lo sé, dado todo lo que está ocurriendo no creo que sea en el futuro inmediato, quizás el próximo año pero la verdad es que no estoy segura. La vida es cambiante, incontrolable y misteriosa, pero si voy, les platicaré mi experiencia, mientras tanto, este capítulo queda en pausa.

Continuará...

miércoles, 1 de abril de 2020

Cuarentena


Como todos ya sabemos, actualmente estamos pasando por una época difícil. En la mayoría de los países se ha impuesto una cuarentena debido a la aparición de este virus que se esta transmitiendo de manera muy fácil y muy rápida en los humanos. Las secuelas, no solamente físicas, sino también psicológicas, emocionales y económicas de esta situación serán perceptibles después de la pandemia, pero sin duda, serán algo que nos afectará a largo plazo.

Cada quién está viviendo de una manera diferente, y no voy a entrar aquí en un debate económico-social, sino más bien creo que este tiempo que tenemos disponible sería muy bueno para reflexionar, no solo de manera individual sino también de manera colectiva. 

Quizás sea tiempo de hacer un switch mental sobre muchas de nuestras propias ideas, derribar creencias y patrones que hemos alimentado durante tanto tiempo que hemos terminado por creerlos, mejorar o cambiar nuestros hábitos, y darnos una pausa para desestresarnos. Creo que este período determinará nuestro futuro, sobre como vamos a actuar más adelante, si seguiremos cometiendo los mismos errores o si por fin abriremos los ojos y cambiaremos las cosas.

A título personal, debo decir que estoy reflexionando sobre varias cosas y me estoy dando cuenta de que tengo ideas que están equivocadas, y que quizás sea tiempo de probar algo nuevo. también me gustaría trabajar en una técnica de pensamiento que me está interesando. He tratado de alimentarme mejor y de hacer actividad física. Estoy tratando de descansar y de que mi cuerpo y mi mente se recuperen del estrés de mi trabajo. Y estoy replanteándome mi papel en la sociedad y en mi entorno laboral, preguntándome no solo como ser mejor en ello, sino como ser un agente de cambio.

Yo sé que cada quién vive una  experiencia difícil, y que hay personas que seguramente la están pasando sumamente difícil, lo único que puedo hacer es desearles fortaleza. Quizás no sirva de mucho, pero en serio espero que estén bien. Mucha luz para todos.

viernes, 27 de marzo de 2020

Educación


Como ya lo dije en mi entrada anterior, mi trabajo es ser maestra. Durante todo el tiempo que llevo impartiendo clases he aprendido mucho cosas, y podría empezar por la frase más cliché: ser docente no es fácil. Y no solamente lo digo por los alumnos, sino por el sistema. Y con esté último estoy en desacuerdo en muchos aspectos.

Creo que fácilmente nos podemos dar cuenta de que nuestro sistema educativo no es bueno, y eso es, en gran parte, porque a mi parecer, carece de esencia, de una personalidad propia. El sistema educativo que tenemos actualmente es un pedacera de otros muchos sistemas de otros países que ha sido remendado y que se ha implementado con resultados.... Esperen, ahora que lo pienso, dónde están los resultados? Dónde están las estadísticas que nos demuestran que este sistema es eficaz? La verdad dudo que las haya.

Como casi todo lo que tiene que ver organizaciones gubernamentales, la educación pública de México es más burocracia que lo que debería ser importante: la educación. Los programas marcan muchísimos temas, que muchas veces no puedes terminar (como docente) por un sinnúmero de razones. Y mientras te las ingenias con estrategias didácticas. dinámicas y demás cosas, el sistema te pide resultados. Te pide personas competentes que dominen técnicas (sin el material ni recursos necesarios porque nunca hay) a un nivel de licenciatura. WTF.

El problema de que nuestro sistema educativo sea una pedacera de otros sistemas es precisamente eso, que queremos simular ser EU cuando no tenemos la infraestructura de EU (y no me hagan hablar de las clases en línea) o Finlandia, o España, o Francia. Y todo termina siendo una amalgama de cosas que prácticamente puedes ver desde lejos que va a fracasar. 

Pero no todo es culpa del sistema, también los alumnos han jugado un papel importante. Dejando de lado la dinámica social (que influye mucho pero que sería muy extenso discutir aquí), yo he visto en mis estudiantes un gran desinterés en su educación, y eso me rompe el corazón. Es un tanto frustrante, no ver esa hambre de conocimiento en tus estudiantes, el ver la gran indiferencia que les da el aprender algo nuevo. Ya no se maravillan, No hay nada que les apasiones. Y eso es triste, muy triste.

Yo que doy una materia que no es fácil para muchos, ni atractiva, es más complicado hacer que los estudiantes se interesen por ella, es muy difícil luchar contra la apatía, contra años y años de construcción social que nos ha dicho que las materias como matemáticas y química son difíciles. Deconstruir una idea como esa, es por demás, una tarea colosal que no puede caer en unos cuantos docentes, sino que debería replantearse desde lo más profundo del sistema educativo. ¿Cómo hacer que nuestros jóvenes se interesen por la ciencia? Esa es un problemas, que en tiempos como este, debería ser esencial para nuestro futuro desarrollo como país.

A nivel personal puedo decir que cada vez que leo un reportaje de "Nature" me sorprende la cantidad de cosas que los científicos descubren cada día, y me impactada por todo lo que aun no sabemos como funciona. Lo mismo cuando veo un documental, o leo algún reportaje de National Geographic. Así que a todos los que lean esta entrada, les invito a que se interesen más por la ciencia, no es necesario que lean revistas especializadas como Nature, pero si despiertan su curiosidad con revistas como "Muy Interesante" y parten de allí, les aseguro que será un viaje muy entretenido. 

Gracias por su lectura.

lunes, 23 de marzo de 2020

Supervivencia

Oficialmente estamos en cuarentena. Recuerdo con pasé por un período similar en mi época universitaria cuando se dio lo de la influenza H1N1, pero no con el impacto de ahora, esto va más allá, pero dejando de lado los análisis financieros y epidemiológicos, todo este suceso me ha puesto a reflexionar. En mi anterior trabajo, yo impartía clases de Biología (ahora doy de química, pero luego les hablaré de eso) y recuerdo que antes Biología me parecía una materia aburrida y tediosa, así que pensé en formas de hacerla más amena a mis estudiantes, porque si a ti no te apasiona lo que impartes, a tus estudiantes mucho menos les apasionará. Entonces comencé a buscar temas actuales de interés y comencé a hacer debates con ellos. Adoraba a mi materia. Me hice fiel discípula de Darwin (aunque nunca he leído El Origen de las Especies, por si alguien me lo quiere regalar) y es precisamente una frase de él que me ha puesto a pensar. "Los instintos naturales se pierden en estado doméstico".

Seas o no creyente de la teoría evolutiva de Darwin, es innegable la verdad que encierra sus palabras. Los humanos (cúspide de la cadena evolutiva) nos hemos domesticado tanto que poco a poco vamos perdiendo nuestros instintos naturales, claro conservamos nuestro instinto de supervivencia como todo especie, pero nos hemos acostumbrado tanto a nuestras comodidades que prácticamente no tenemos habilidades básicas de nuestros ancestros. Si hubiera un contingencia aún mayor, cuántos de nosotros sobreviviríamos realmente? Cuántos sabemos cazar? Cuántos sabemos diferenciar que plantas (de todas las que existen) son comestibles o medicinales? Cuántos sabemos como escoger frutas? Cuántos sabemos nadar? Cuántos tenemos la suficiente resistencia física para correr, trepar, brincar, etc? Como sobreviviremos sin celular e internet? Creo que para ahorita ya podemos ver el panorama de como llegaría a ser si algo así ocurriera: devastador.

Desafortunadamente, los humanos, hemos ido perdiendo poco a poco nuestra conexión con la madre naturaleza, nuestra creadora, quién nos otorgó el maravilloso don del raciocinio y que no lo hemos sabido utilizar. Los humanos hemos olvidado nuestra parte natural y nos hemos transformados en seres devotos de la tecnología, olvidando practicar nuestras habilidades y destrezas, dejando de lado aprendizajes básicos, todo por un poco de atención y status que al final de todo es temporal. Y es, precisamente esa indiferencia la que nos esta llevando poco a poco a nuestra extinción.

Aún en pleno 2020, escucho a personas decir que el cambio climático no existe y que todo es político. Señores, di dejaran un poco más el facebook y se pusieran a leer más sobre ciencia, se darían cuenta de que es real. Es increíble como, con este suceso, las condiciones de contaminación han cambiado, la tierra y la naturaleza necesitan un respiro, y creo que es un respiro de nosotros. Porque no hacemos un examen y nos ponemos a pensar si en verdad la plaga somos nosotros? 

Nosotros, humanos, cúspide de la cadena evolutiva, no hemos hecho lo que nos toca como especie. El raciocinio lo hemos echado por el desagüe y nos hemos vuelto criaturas domésticas indiferentes a todo que no nos incumba, a veces creo que los humanos solo somos capaces de entender nuestro propio dolor, y no podemos conectar con lo que siente nuestro planeta, y eso es triste.  Lo que pasó hace poco en Australia y fue devastador, pero ya lo hemos olvidados porque ahorita todo es gira entorno a este suceso, y cuando pase también lo olvidaremos y seguiremos así, continuando en un círculo vicioso que nos llevará a nuestra propia extinción. 

Ya mejor le cortó hasta aquí porque esta entrada podrían ser hojas y hojas. Cuídense mucho. Saludos!

domingo, 8 de marzo de 2020

Sobre el acoso


Les voy a contar algo desagradable. Esto me paso cuando era una adolescente, pero creo que fue un suceso que en su momento me marcó, y dado lo que está pasando en nuestro país, creo que hablar de estos temas se ha vuelto algo de importancia para todas. Ya les conté hace algún tiempo de la vez en que un taxista me acosó y lo sumamente incomoda que me sentí, bueno, esta entrada también es sobre ese tema, solo que se remonta más atrás, mucho tiempo más atrás.

Aun recuerdo ese momento bien. Yo tendría unos 13 o 14 años aproximadamente y acompañé a mi mamá al centro de la ciudad a comprar unas cosas. Yo llevaba puesto un short falda negro de pana y una blusa blanca. Era un atuendo x, y el short no era muy cortito ni nada por el estilo. Yo iba caminando por una tienda bastante conocida del centro, y había mucha gente. Fue entonces que lo sentí. Una mano me acarició la pierna. Yo no pude ver quién era pero me asusté. Le dije a mi mamá lo que me había pasado y me dijo que me tranquilizara, y me preguntó que si había visto quién había sido pero le dije que no. No pude alcanzar a ver quién lo había hecho.

A partir de ese momento, y por muchos años, dejé de usar shorts y vestidos. Siempre trataba de usar panatalones o faldas largas, cualquier cosa que pudiese parecer "reveladora" no la usaba, simplemente quería usar ropa que me hiciera sentir "segura". Oh, la ingenuidad. Después de mucho tiempo volví a usar vestidos, faldas y cualquier tipo de ropa que me gustara. Poco a poco me fui dando cuenta de que sin importar la ropa que usara, las miradas siempre estaban ahí, realmente no había "ropa segura" porque el problema, el cual es el acoso, no es una cuestión de usar determinado tipo de ropa, sino más bien es una cuestión de educación, de valores.

A veces, como sociedad, queremos minimizar una problemática que es grave, pero que queremos tapar diciendo que es un "comportamiento natural" y no señores, el acoso no es natural. Yo he llegado al punto, en el que elijo mi ropa de acuerdo en el tipo de transporte en el que vaya a viajar, porque no es lo mismo que un amigo o amiga me de ray y pueda sentirme más cómoda y segura y ponerme algo escotado, que llevar ese misma ropa en el camión o en un taxi, no se puede. A eso hemos llegado.

¿Cuál es la ironía de ésto? Que justo cuando piensas que puedes vestirte de una manera linda, o que a ti te gusta porque ya tienes una pareja y tienes ese sensación de seguridad, resulta que a tu pareja no le gusta que te vistas así o que te arregles. Entonces cuando podrás arreglarte como a ti te gusta?Recuerdo que solía tener un vestido que solo usaba cuando iba con mi papá, porque sabía que solamente así no me iban a faltar a respeto, ¿cuantas veces lo use?  Dos, y mejor lo regalé porque nunca me iba a sentir cómoda usándolo en público. 

Si, el acoso es una realidad, no algo que nos inventamos, y no, no es un asunto que deba normalizarse.  Esta es una de las varias anécdotas desagradables que me han pasado, por eso es que podemos, no debemos dejar de alzar la voz. 

lunes, 2 de marzo de 2020

Marriage Story


Hace unas semanas vi la película "Historia de un matrimonio" o "Marriage Story" en Netflix, y debo decir que me dejó un profundo sentimiento de tristeza, y me dejó reflexionando en varias cosas, y no tanto porque yo ya haya pasado por un divorcio, pero si me ha tocado vivir muy de cerca el de varias personas, es por eso, que la película tocó mi corazón profundamente.

En un divorcio nunca hay ganadores, es más no creo que nunca haya nada que ganar, a excepción de bienes materiales, y aún así eso no se me hace relevante, porque lo que se pierde en verdad son los lazos familiares que llevo tanto tiempo construir. Al final, un divorcio termina siendo una pérdida, y te cuesta no solo dinero, sino también tiempo, y sentimientos. 

La película inicia de un modo excepcional, mencionando lo que cada uno ama del otro, y esto se me hace bastante interesante, porqué mientras vas transcurriendo la película te das cuenta de como todo eso que unía a dos personas termina disolviéndose, convirtiéndose en nada y llegando a decir cosas realmente hirientes que nunca pensaste que un día le dirías a la persona que más amabas, e incluso pudiendo llegar a odiarla casi tan intensamente como la amabas.

Otra cosa que llamó mucho mi atención es que muchas veces damos por sentado que nuestra pareja es feliz, muchas veces porque nosotros no nos atrevemos a preguntar (quizá por temor a la respuesta) si realmente lo es, si todas esas decisiones que se han tomado ha sido para la felicidad de ambos. Otras veces es que la otra persona involucrada tampoco desea expresar su descontento, inconformidad o incluso infelicidad, porque quizás piensa que con el tiempo se arreglará todo. Y entonces asumimos que todo está bien y que cada uno es feliz, hasta que un día BOOM! estalla la bomba y todo se vuelve pedazos. Y es entonces cuando todo lo que hemos callado nos sale a borbotones, y todo se va a la mierda. A veces me parece un tanto irónico el hecho de que, habiendo tantas herramientas para comunicarnos, nosotros mismos, los seres humanos, no hemos podido desarrollar en su totalidad esa capacidad, y vamos por la vida asumiendo, suponiendo y tratando de adivinar lo que la otra persona quiere, cuando sería mucho más fácil el poderlo expresar.

Marriage Story me parece un estudio sobre un tema, que en lo particular, me llega mucho, y que cada vez suele ser más común, y también sobre las relaciones humanas y su psicología, y nuestra incapacidad de comunicarnos. Es una película que te hacer sentir, y por eso me gustó, porque eso es precisamente la finalidad del cine. Sino la han visto se las recomiendo, y si ya la vieron compartánme su opinión. Saludos!