lunes, 23 de julio de 2018

De vuelta a la realidad...



Después de un buen tiempo es momento de regresar a la realidad. Y es que, haciendo un poco de retrospectiva, el año anterior se me hace un poco extraño, como si hubiese sido sacado de un sueño. Quizás yo sea un poco como Don Quijote, y a veces me dan mis ratos de locura y tengo que irme a cazar gigantes, aunque en realidad sean molinos de viento. Todos tenemos derecho a escaparnos a nuestra surrealidad de vez en cuando, y yo puedo decir que viví en ella un buen rato. ¿Aprendí de ella? Claro. Esa extraña surrealidad me dejó lecciones, y sé que si no hubiera habitado en ella no las hubiese aprendido. Pero como El Quijote, quizás sea tiempo de recobrar (un poco) la cordura. 

Siempre he sabido que uno tiene derecho a equivocarse. Tiene derecho a tocar fondo. Tiene derecho a cajetearla, a mandar todo al carajo y volver a comenzar. Uno tiene derecho a reinventarse, a volver a crearse otra vez, a aventurarse de nuevo. Sí, y yo a veces lo olvido. Mi estúpida necesidad de buscar la perfección a veces hace que me hunda en un estado depresivo. Aunque he batallado con mis control issues aún sigo lidiando con ellos. ¡Suelta! Me dice una vocecita en la cabeza, suéltalo ya, déjalo ir, déjalo que se pierda, que se lo lleve el viento (sí es una canción y ya me divagué)...

Retomando el punto, es hora de comenzar de nuevo, de retomar algunas cosas y dejar, por la paz, otras. Es tiempo de volver al aquí y al ahora, y aunque las cosas no siempre (aunque ya a estas alturas diría, casi nunca) salen como uno quiere, hay que tomar nuevas perspectivas porque así es esto de vivir.

Después de haber hecho muchas estupideces, haber cometido varios errores y haber tomado malas decisiones, he pensado que tal vez sea el momento de hacer las pases con ese pasado que aún es un poco reciente, tomar las lecciones y volver a retomar el rumbo, o lo que creo pensar que es un rumbo, porque al final, la vida es un desconcierto total, y la mayoría de las veces vamos a la deriva (o quizás sea yo). En fin, quizás sea momento de regresar a la Mancha y replantearme muchas cosas de nuevo y poner algunas otras en su sitio.

La aventura fue interesante y también estresante, al final entendí que Dulcinea no era para mí y que existen más aventuras por venir. Quizás en algún momento vuelva a la surrealidad, aunque muy probablemente sea distinta, pero por el momento nos quedaremos aquí, en esta realidad.

miércoles, 18 de julio de 2018

My heart is broken


Hace poco fui a McDonald's con un conocido. Todo iba bien hasta que la siguiente escena me partió el corazón en veinte mil pedazos: estábamos platicando y comiendo un helado, cuando vi que un niño se acercó al bote de la basura y comenzó a registrarlo, del boté sacó un vaso y se lo llevo. Al cabo de un rato, el niño salió del establecimiento tomando refresco. Eso me rompió el corazón, y es una imagen que me quedará grabada para siempre. Rogué que el vaso fuera uno distinto del que sacó de la basura. El niño se fue junto con su padre (o eso supongo) y otro niño.

Cada vez que recuerdo esa escena siento una punzada en el corazón. La plática perdió sentido para mí y comencé a preguntarme en qué momento como sociedad habíamos llegado a ese punto. ¿Porqué?, en serio, ¿porqué?

No pude evitar sentir miles de cosas. Por un lado me sentí triste, al pensar si el vaso era el mismo o no, el hecho de que el niño expusiera su salud de esa manera me sobrepasó, y sé que así pasa todo los días con miles de niños todos los días, pero no es justo. De verdad que no. Me sentí, culpable, porque yo mientras tanto comía un helado. Estaba comiendo algo que quizás esos niños rara vez comen. Me sentí, impotente, porque quisiera ayudar a quitar esta situación pero no sé cómo. No quiero ser como esas personas que se la pasan compartiendo en facebook cosas como ésta y ya, de ahí no pasa, lo hago tratando de hacer algo de conciencia, y de paso, saber si alguien tiene una idea de como se puede contribuir a que este tipo de situaciones ya no ocurran más. En serio que mi mente se he devanado buscando una solución.

¿En qué punto llegamos a esto? No quiero hablar sobre política porque al final nunca solucionamos nada, y creo que eso ya debemos empezar a dejarlo de lado. Si ya sé que suena algo utópico pero cada vez que veo escenas similares a esta, siento que no puedo. Si alguien tiene una idea de como solucionar o contribuye de alguna manera a disminuir estas situaciones por favor dígame. Un saludo a todos.

sábado, 14 de julio de 2018

Ya no hay "Él"


Si ustedes han leído este blog desde hace tiempo, se darán cuenta que escribía muchas cosas para alguien llamado ÉL. De hecho, todo lo que le escribí, sean poemas, prosas, historias y demás cosas, las pueden encontrar bajo la etiqueta "él" (por si sienten la curiosidad). Si han leído o leen alguna de esas cosas, se darán cuenta que "él" (que original, jajajaja) era una especie de amor platónico. En algún punto de mi vida lo llegué a considerar mi alma gemela, porque tenía muchas características que yo encuentro atractivas en un hombre, y que esta en mi lista imaginaria del que sería el "amor de mi vida" (qué también creo que es imaginario, pero en fin).

En fin, resulta que hace un par de semanas, "él" y yo tuvimos una diferencia de opinión, su actitud no me gustó y me di cuenta de que, yo ya no sentía ese amor platónico que alguna vez tuve hacia su persona. Haciendo retrospectiva, creo que desde hacía mucho ese sentimiento o ilusión ya se había evaporado, pero al haber tenido ese desacuerdo me lo confirmó.

Cuando las ilusiones se terminan sueles tener una perspectiva más real de las cosas y de las personas, y también, te das cuenta de que todo en esta vida tiene un final. Supongo que ya no habrá más textos para "él" así que el puesto de mi muso sigue vacante. En fin, eso me hace recordar, y también al señor Conejo al que le agradezco mucho sus consejos, que hay un sinfín de temas por escribir. Ya sé, quizás esta entrada sobraba, pero quise compartirlo porque me parece que algo que es parte natural de la vida. Hasta aquí mi reporte Joaquín.


martes, 10 de julio de 2018

Uninspired


Últimamente no he escrito en el blog tanto como quisiera, y quizás sea, en gran medida en que he sentido falta de inspiración. Y no es que no tenga sucesos, anécdotas o ideas que contar, sino que no hallo las palabras que quiero para poder plasmarlas. No sé, será que todo a mi alrededor ha estado un poco extraño en el tiempo reciente, y eso me hace pasar más tiempo pensando que escribiendo (inserte aquí suspiro).

Yo misma me he sentido algo rara también. Tal vez sea la edad, cada vez siento más cerca mi próximo cumpleaños, y eso a veces me hace entrar en modo introspección bien cañona. O tal vez sean todos los acontecimientos que están sucediendo y que están permeando en mí, o tal vez sea porque la luna está en Marte o vaya usted a saber. Ni nosotras las mujeres a veces sabemos qué nos pasa, eso sigue un misterio que la ciencia no ha logrado resolver.

Alguien de los lectores de este blog sugiere algo para volver a recuperar la inspiración? Porque tal parece que las musas no están de mi lado. Espero escribir algo más decente la próxima vez, mientras tanto seguiré escuchando a los Arctic Monkeys. Saludos.

lunes, 2 de julio de 2018

A ti te quería encontrar...¿Es neta?


El día sábado fue al cine con una de mis amigas. Vimos la película mexicana llamada "A ti te quería encontrar". Recuerdo que cuando vi el tráiler se me antojaba, sin embargo, para cuando acabó la función mi amiga y yo estábamos furiosas, con ganas de tirar lo que quedaba del refresco y las palomitas a la pantalla del cine. Mi opinión versión corta: es un asco de película, que no valió absolutamente para nada los $60 pesos que gasté. Hasta aquí paren de leer los que no la han visto porque vienen los spoilers, avisados.



La película trata sobre un tipo que después de diez años de relación con su novia, deciden comprometerse, por culpa de una despedida de soltero que terminal mal, el protagonista conoce a la gerente del hotel donde fue la fiesta,  y se enamora de ella. Claro, jamás le dice que esta comprometido. La gerente también se enamora de él. El tipo decide terminar con su novia el día de la boda y al final la gerente y él terminan juntos. ¿Ya pueden deducir porque estoy molesta? Sé que muchos pensaran, ya deja de hacer tanto drama es solo una película. Lo sé, pero este es mi blog y puedo dar mi opinión. Así que aquí voy. 

Mucho de lo que me molesta de esta trama es lo que se esta reflejando, la sociedad que se esta reflejando en esta película. Es pleno 2018 y para sorpresa de nadie la película refleja una sociedad donde la infidelidad y las mentiras masculinas (en términos amorosos) son de lo más normal y aceptadas. Y el papel que le dan a ambas mujeres siguen siendo, permítame el uso de la palabra, de lo más machista. Me corroe las venas el hecho de que el que a una mujer la engañen y le pongan los cuernos sea aceptable, y que se vea como algo "romántico", como mujer me siento totalmente insultada. Estoy casi segura de que, si la película tuviera la misma trama pero con el personaje femenino cometiendo la infidelidad y todo lo demás, sería totalmente criticada.

Hago un paréntesis para decir que si el chavo hubiese sido honesto y hubiese terminado desde antes para vivir su romance con la nueva chica que conoció no tendría nada de malo, no estoy en contra de eso, pero la falta de honestidad es algo que me molesta. ¿Puede ocurrir que conozcas a alguien cuando estás comprometido y te enamores? Sí, la vida es rara, pero lo que no es válido es el engaño. 

Un conocido me dijo que toda la situación de la película es perfectamente normal. ¿Es neta? Diría que si la mayoría piensa así no me sorprendería tampoco,al fin y al cabo, la sociedad se rige bajo esos estándares de doble moral.  Si ya la vieron, ojalá puedan dejar aquí un comentario. Saludos!