jueves, 26 de febrero de 2015

Amor cuántico

Últimamente he pensado en el amor en términos cuánticos. Sí, lo sé suena un poco raro. La física cuántica o mecánica cuántica nos dice (según wikipedia) "describe cómo en cualquier sistema físico –y por tanto, en todo el universo– existe una diversa multiplicidad de estados, los cuales habiendo sido descritos mediante ecuaciones matemáticas por los físicos, son denominados estados cuánticos."

Es cierto, el amor no se puede explicar por ecuaciones matemáticas, aunque hay una variedad de reacciones químicas se acercan a una explicación científica del amor. Tal vez para algunos esto no tiene ni tendrá sentido (ajá como el amor!) pero que si no es el amor más que una mutiplicidad de estados. Y es que podemos sentir una variedad de cosas a la vez. Y es que el amor y la fisica uántica son un tanto complicados. O tal vez es porque muchos no sabemos nada de física cuántica...aunque pensandolo bien acaso sabemos algo sobre el amor?

Y vaya que hay muchos estudiosos en ambas áreas. A diario los científicos quieren descubrir los enigmas del universo, y a diario los poetas y escritores se desvelan plamando sus teorías sobre el amor. Pero al final ambos siguen siendo un misterio. 

Ya lo decían en Interestellar “El amor es lo único que somos capaces de percibir que trasciende las dimensiones del tiempo y del espacio...El amor no es algo que hayamos inventado, es observable, poderoso... Tiene que significar algo.”

Tal vez nosotros, las personas solo seamos partículas elementales,  que se mueven en tiempo y espacio. Y nos unimos con otras a través del amor.

Le conté mi teoría a una amiga mientras tomabamos un café y me dijo: "Cariño, el amor no se explica, solo se siente". Quizás esta vez tenga razón. 

viernes, 20 de febrero de 2015

Untitled II

A veces lo extraño, pero ya no es como antes.
Escucho la lista de reproducción que me recuerda a él pero ya no siento lo mismo.
Escribo estas lineas, pero ya no pienso tanto en él.
Y así es como me doy cuenta de que ha empezado el proceso llamado olvido.
A veces llega así, sin darte cuenta tu mismo. Poco a poco la imagen se va haciendo borrosa. La de esa persona, y la tuya misma cuando pensabas en él o en ella. Comienza la transformación en recuerdos.
Poco a poco te das cuenta de que el tiempo ha transcurrido, y que probablemente ya nada volverá a ser igual. Nada lo es, ni siquiera tu mismo. Hay un antes y un después de enamorarnos.

Hay cosas inevitables en la vida: los corazones rotos, las amistades fracturadas, los silencios incómodos, la soledad dulce. Hay felicidad y hay tristeza. Somos maduros e inmaduros. Vivimos en una dualidad. Somos humanos. Hay ratos en los que me acuerdo de él. Pero me recuerdo a mi misma que estoy en el proceso de olvido. Que lleva tiempo. Tiempo, esa unidad de medida que rige nuestra vida. Y pienso en el amor en términos cuánticos. Pero me dicen que el amor no se explica, se siente. Yo contradigo, como siempre.

 A veces pienso en el, en si lo encontraré. Y así de rápido deshago ese pensamiento.
Yo ya no me preocupo por esas cosas.
Y trato de hilvanar una poesía pero no lo consigo. Los versos están dispersos como mis pensamientos.
Como esta tarde de hoy.


miércoles, 18 de febrero de 2015

La Física de la Búsqueda

"La regla de la física de la búsqueda viene a decir algo así: Si tienes el valor de dejar atrás todo lo que te protege y te consuela, lo cual puede ser cualquier cosa como tu casa o viejos rencores, y embarcarte en un viaje en búsqueda de la verdad, ya sea hacia lo interior o lo exterior, y si estás dispuesto a que todo lo que te pase en ese viaje te ilumine, y si aceptas como tu maestro a todo el que te encuentres en el camino, y si estás preparado sobre todo a afrontar y a perdonar algunas de las realidades muy duras de ti mismo, entonces la verdad no te será negada."

Así reza una frase de mis películas favoritas "Comer, rezar, amar" . He mencionado antes ya en el blog que el libro de Liz Gilbert ha sido uno de los que cambió mi vida. Y es que creo que estamos en una búsqueda, ya sea algo o alguien, adentro o afuera de nosotros, pero muchas veces sin saber bien a dónde ir. Pero si algo es cierto en esta frase es el que  dice que la honestidad hacias ti mismo te llevará por el camino de tu búsqueda. 

Pero ser honestos con nosotros mismos es un camino díficil. Muchas veces pensamos que nos conocemos, pero lo cierto es que a veces nos adaptamos a ser lo que los demás quieren que seamos, o creemos lo que los demás dicen de nosotros. Pero que tan cierto es? Si en vez de estar en la oficina deseamos estar en un estudio creando obras de arte? 

Pero aceptarse es dar un gran paso hacia adelante. Cambiar aspectos de nosotros mismos que no nos gustan es un paso más. Aceptar que no podemos cambiar a los demás, nos da otro paso. Cambiar para mejorar suma otro. Descubrir que queremos nos acerca más.

A veces creo estar en esa búsqueda, pero por momentos me estanco en el camino y dejo de avanzar. Es de humanos, todos nos cansamos alguna vez. El problemas es acostumbrarnos demasiado a ese estado de inactividad.

Quizás sea tiempo de avanzar...

domingo, 15 de febrero de 2015

Post-San Valentin

Ayer fue Día de San Valentín. Oh sí, ese día en el que se celebra el amor y la amistad, debo decir que no es uno de mis días favoritos. Dejando a un lado el hecho de que es un día comercial y consumista, nunca sentí mucha empatía por este día. Y es que cuando era más joven, veía un monton de parejitas a mi alrededor, con sus globitos, dandose besos, caminando de la mano, etc, etc. De repente ver tanto color rojo y rosa, y corazones por todas parte me asfixio. Me volví una grinch, y deje de entusiasmarme por el tan popular 14 de Febrero. Yo no iba a ser parte de toda esa hipocresía comercial.

Sin embargo, el día de ayer volví a festejar San Vaentín. No, no fue en pareja. Sino con mis amigas, y debo decir que me gustó. Oh sí, yo la anti comercial, me deje envolver por el espíritu San Valentiniano y fue participe de esa celebración.  Y aunque tal vez no hubo flores, globos, peluches ni chocolate si hubo plática y diversión.

Terminando la fiesta, y mientras recogía todo lo que había quedado, me descubrí pensando en el festejo y en lo que representaba para mí el 14 de Febrero. Quizás mi actitud de antipatía era el reflejo de que ese día me recordaba que era una forever alone y que aun no tenía a mi alma gemela.Alguna vez me la llegue a pasar sola porque mis amigas tenían a sus parejas, o salían con alguien, y yo me quedaba como la Bridget Jones del grupo. Tal vez sea que mi concepto de San Valentín, era para mí que solo se celebraba el amor de pareja. Pero me puse a pensar que tal vez podía unirme a tal celebración con un cocepto diferente, el de celebrar el amor. Culquier tipo de amor: por tu amig@s, por tus herman@s, por tu familia, por ti mismo. Porque al final hay muchos tipos de amor.

No quiero tener una versión comercial de ese día, ni comprar tarjetitas y cosas por el estilo, tampoco verlo como cuando era mas joven, con antipatía. Sino verlo de una form diferente, más madura, por así decirlo.

Incuso un amigo me dijo "pero si tu no festejas este día", a lo que yo respondí "a veces hay que romper la tradición".



martes, 10 de febrero de 2015

Sobre esas pláticas rosas...

A veces creo que las chicas hablamos demasiado sobre relaciones. Quizá sea parte de nuestra genética, o tal vez porque así fuimos educadas, pero lo cierto es que las platicas sobre los amores son obligadas en cualquier reunión de café. Oh Dios.

Recuerdo que hace un par de años este tema me desesperaba. El que mis amigas se la pasaran platicando de sus novios se me hacía un tanto tedioso y aburrido, porque siempre era lo mismo, o se quejaban de ellos o exclamaban lo felices y afortunadas que eran por estar con ellos. Siempre lo mismo, y yo solo miraba mi taza de café, escuchándolas. Oh Dios. 

No lo voy a negar, yo también hablaba de esas cosas de vez en cuando. Y es que tal parece que las mujeres al estar más conectadas con nuestro lado emocional sentimos la necesidad de hablar de ello, cosa que en los hombres es menos usual. Pero nosotras, oh nosotras, hasta nos reunimopara hablar de eso específicamente. Como si fuera un asunto de trabajo, o una cuestión de seguridad nacional.  No podemos evitarlo, es parte de nosotras. 

A veces quisiera hablar de otras cosas y menos sobre chicos, como de libros que hemos leido recientemente, o peliculas que nos gustan o arte, o ciencia, o lo que sea, pero por alguna razón desconocida siempre terminamos volviendo a las cosas del corazón. Es que no tenemos de que más hablar?! Oh Dios. 

Mujeres quién nos entiende, si nos quejamos cuando tenemos novio y nos quejamos cuando no lo tenemos. A veces creo que ni yo misma las entiedo y eso que soy una de ellas.

Tengo una amiga con la que casi no hablamos sobre chicos, y tenemos pláticas sobre teorías espaciales, películas de ciencia ficción,  libros de filosofía y pláticas existencialistas. Cosas sin sentido y demasiado nerds. Y me agrada, a veces es como una bocanada de aire fresco entre tanto dilema rosa. Les aconsejos buscar una amiga así :) 

No, no es que odie las pláticas sobre chicos, ni que quiera que desaparezcan de la faz de la tierra. Yo también hablo sobre esas cosas  (para muestras algunas entradas de este blog) y estoy consciente de que seguiremos hablando sobre ellas durante mucho tiempo, porque así somos, pero de vez en cuando hay que hacer algo distinto.

sábado, 7 de febrero de 2015

She's Not Me..



Andar con el corazón roto no es fácil, pero es algo que a todos nos toca vivir. En la actualidad, con todas las redes sociales que existen, romperse el corazón es cosa de todos los días. Y es que nuestra curiosidad es más grande que nosotros, ahí vamos, buscando "evidencia" de lo que hacen nuestras parejas, o de las personas que nos gustan. Quizá está en nuestro código genético ser un tanto masoquistas, sino porqué lo hacemos? Otra pregunta sin respuesta.

Y es que una vez que encontramos lo que nosotros ya dábamos por hecho, pasamos a la comparación? Quizás sentimos un placer culposo en atormentarnos, y allí estamos, viendo todas nuestras fallas, sintiéndonos de una forma miserable. Y no podemos evitar pensar : porqué ella? y nos enfocamos en todos nuestros defectos, magnificándolos, haciéndonos creer que es nuestra culpa.

No podemos evitarlo, así somos.

Eso me paso mientras venía en el autobus de regreso a casa.Pensaba porque yo no fui la "elegida", porque prefirió a alguien más? Lo cierto es que yo no tengo la respuesta, preguntarle, dolería aún más. O quizás nunca me lo diría. 

Compararse con alguien más no sirve de nada. Es imposible mandar en el corazón de alguien más, por más que tu quieras, y tengas el corazón roto...tal vez hay cosas destinadas a no ser.

martes, 3 de febrero de 2015

Love Stuff



Hace un par de días tuve una plática con una amiga, mi OP mejor dicho. Durante esa conversación le mencioné que mi hermana (más joven que yo) me había dicho que ella ya consideraba a alguien como el amor de su vida. PUM! esa sencilla frase me dejo en shock y siguió retumbando en mí por días. Le dije a mi amiga que como es posible, que ella siendo más joven pudiera asegurar tal cosa y yo con más anos, no pudiera mencionar a alguien como el amor de mi vida. Será que hay algo mal en mí? 

Hace rato me puse a leer un artículo, titulado "Estás segura de que te gustan los hombres?", y no, no trata sobre lesbianismo. El artículo habla sobre como nosotras, las mujeres, nos formamos ideas sobre los hombres de acuerdo a nuestras malas experiencias. Y es que todos conocemos a alguna que diga "todos los hombres son iguales", y nos vamos con esa idea, y cada vez que un chico nos desilusiona solo la vamos reforzando. Para no hacer el cuento largo, dice que si en verdad nos gustan los hombre, tenemos que apreciar sus aspectos positivos y dejar la idea de que todos son iguales.

Rápidamente me puse a pensar en mis amigos, en los chicos con los que he salido, y en mis propias ideas. Entonces una duda me asaltó: es que acaso mis ideas feministas me han dejado una mentalidad anti hombres? Estoy peleada con el género masculino? O simplemente hay algo mal en mí?

Siempre he defendido el feminismo, creo que la igualdad es algo importante, o crucial, para el progreso de la sociedad, pero es que acaso me he vuelto una feminista radical?  

Mientras se acerca el tan esperado Día de San Valentín (un día por el cual no siento ninguna emoción), no puedo evitar preguntarme: algún día encontraré al mentado "amor de mi vida"? Tendré un alma gemela? En verdad existe el amor?

Respiro. No tengo la respuesta para ninguna de esas interrogantes, igual que los científicos no tienen una para la creación del universo. Es que acaso el amor es selectivo y solo de decanta por ciertas personas? O tan solo es cuestión de esperar? Es cosa del destino?  

Esto del amor es complicado.